Comercialización en los ‘retailers’ subió 200%

¿Qué opina del estudio de Fenalco?

Tiene muchas falencias: se basa en los datos de dos subdistribuidores de Comcel, pero no toma en cuenta qué pasa en el resto del mercado. Desafortunadamente, aun cuando es bueno conocer qué ha pasado dentro del modelo de distribución de terminales donde los operadores contrataban a un tercero para que vendiera teléfonos y planes, pero sobre todo planes amarrados a terminales, no muestra cuál ha sido el impacto en otros grandes distribuidores y me sorprende de Fenalco que no tenga la voz de las grandes superficies (‘retailers’) . En las reuniones informales que hemos tenido con ellos, hemos visto el mayor impacto positivo de las cláusulas. Han incrementado hasta en un 200% las ventas sobre las típicas de un operador en esas superficies. El estudio es bueno, nos sirve, pero tiene ese desafortunado sesgo. Si Fenalco hubiera profundizado más con sus propios agremiados, hubiera llegado a conclusiones diferentes.

¿Qué ha pasado desde que se eliminó la cláusula de permanencia?

Hemos hablado, literalmente, con todos los agentes del mercado, con fabricantes de gama alta, media y baja. Y lo que pasó fue que se reconfiguró el mercado. Los usuarios están aprendiendo a comprar, que no por comprar el más costoso tienen el mejor. Eso ha hecho que las terminales en el pasado hoy son las más vendidas. Las de gama media y media alta son las más vendidas. Eso pasa ahora y antes no, porque no las encontraban.

¿El precio del servicio ha bajado?

Eso es lo que hemos visto. Encontramos que quienes no tienen cláusulas de permanencia han llamado a su operador y les han incrementado el número de minutos, la capacidad de datos, y les han bajado la tarifa hasta un 35% del valor del plan. Esa es la verdadera ganancia de la medida, que los precios de los servicios han bajado y los usuarios van a ahorrar lo del equipo en el pago del servicio.

¿En qué terminales hubo impacto?

En los de gama alta alta, como por ejemplo el Galaxy Note, un iphone 5S, todos los equipos que pasan de $1’200.000 han tenido el mayor impacto negativo. Pero los fabricantes han sido compensados con los equipos de gama media y media alta, que se han vendido en dos y tres veces más unidades de lo que vendían en el pasado. Hasta la fecha no ha habido ningún impacto negativo distinto al que era previsible y ese es el de las terminales de gama alta.

¿Los teléfonos subieron de precio?

No. Y lo pueden decir las grandes superficies. En lo mínimo se ha mantenido estable. Muchos usuarios pensaban que el teléfono valía lo que le pedían de la cuota inicial. Hoy los operadores están revelando el precio de la terminal en la factura y ese es muchísimo más alto que el valor de la cuota inicial. Pero cuando ya un usuario observa su factura y mira lo que pagó —hay gente que ha pagado más de $2’500.000 por un teléfono—, pues ve que la medida sí tuvo un efecto importante. Hemos hecho encuestas y nos dimos cuenta de que la cláusula es una cosa de gente rica. ¿Eso qué quiere decir?, que se preocupan por esa cláusula las personas que pagan planes superiores a $100.000, estratos 5 y 6, y uno de los impactos negativos que tenía esa cláusula era que los usuarios prepago terminaban subsidiando-financiando a los pospago. Cuando terminemos el estudio, vamos a mostrar todos los elementos.

¿Qué opina del estudio de Fenalco?

Tiene muchas falencias: se basa en los datos de dos subdistribuidores de Comcel, pero no toma en cuenta qué pasa en el resto del mercado. Desafortunadamente, aun cuando es bueno conocer qué ha pasado dentro del modelo de distribución de terminales donde los operadores contrataban a un tercero para que vendiera teléfonos y planes, pero sobre todo planes amarrados a terminales, no muestra cuál ha sido el impacto en otros grandes distribuidores y me sorprende de Fenalco que no tenga la voz de las grandes superficies (‘retailers’) . En las reuniones informales que hemos tenido con ellos, hemos visto el mayor impacto positivo de las cláusulas. Han incrementado hasta en un 200% las ventas sobre las típicas de un operador en esas superficies. El estudio es bueno, nos sirve, pero tiene ese desafortunado sesgo. Si Fenalco hubiera profundizado más con sus propios agremiados, hubiera llegado a conclusiones diferentes.

¿Qué ha pasado desde que se eliminó la cláusula de permanencia?

Hemos hablado, literalmente, con todos los agentes del mercado, con fabricantes de gama alta, media y baja. Y lo que pasó fue que se reconfiguró el mercado. Los usuarios están aprendiendo a comprar, que no por comprar el más costoso tienen el mejor. Eso ha hecho que las terminales en el pasado hoy son las más vendidas. Las de gama media y media alta son las más vendidas. Eso pasa ahora y antes no, porque no las encontraban.

¿El precio del servicio ha bajado?

Eso es lo que hemos visto. Encontramos que quienes no tienen cláusulas de permanencia han llamado a su operador y les han incrementado el número de minutos, la capacidad de datos, y les han bajado la tarifa hasta un 35% del valor del plan. Esa es la verdadera ganancia de la medida, que los precios de los servicios han bajado y los usuarios van a ahorrar lo del equipo en el pago del servicio.

¿En qué terminales hubo impacto?

En los de gama alta alta, como por ejemplo el Galaxy Note, un iphone 5S, todos los equipos que pasan de $1’200.000 han tenido el mayor impacto negativo. Pero los fabricantes han sido compensados con los equipos de gama media y media alta, que se han vendido en dos y tres veces más unidades de lo que vendían en el pasado. Hasta la fecha no ha habido ningún impacto negativo distinto al que era previsible y ese es el de las terminales de gama alta.

¿Los teléfonos subieron de precio?

No. Y lo pueden decir las grandes superficies. En lo mínimo se ha mantenido estable. Muchos usuarios pensaban que el teléfono valía lo que le pedían de la cuota inicial. Hoy los operadores están revelando el precio de la terminal en la factura y ese es muchísimo más alto que el valor de la cuota inicial. Pero cuando ya un usuario observa su factura y mira lo que pagó —hay gente que ha pagado más de $2’500.000 por un teléfono—, pues ve que la medida sí tuvo un efecto importante. Hemos hecho encuestas y nos dimos cuenta de que la cláusula es una cosa de gente rica. ¿Eso qué quiere decir?, que se preocupan por esa cláusula las personas que pagan planes superiores a $100.000, estratos 5 y 6, y uno de los impactos negativos que tenía esa cláusula era que los usuarios prepago terminaban subsidiando-financiando a los pospago. Cuando terminemos el estudio, vamos a mostrar todos los elementos.