Desempleo llegaría a 14%

Aunque para octubre de este año la tasa de desempleo nacional llegó a 11,5%, equivalente a 1,4 puntos porcentuales más que el mismo mes de 2008, para enero del próximo año la desocupación podría superar el 14%.

Tradicionalmente, en enero se registra la tasa de desocupación laboral más alta, mientras que el mes de diciembre normalmente registra la tasa más baja, debido a la creación de empleo estacional durante la temporada de Navidad y Año Nuevo.

Ahora bien, cuando el DANE entregue los datos de diciembre no se puede perder de vista que los resultados ‘positivos’ no expresarán la resolución de los problemas estructurales en materia de empleo, lo cual sólo ocurrirá cuando se consolide la recuperación económica. Es decir, habrá que esperar entre seis meses y un año, porque el ajuste en materia de empleo no es automático.

Es importante tener en cuenta que tras la recesión de 1999, Colombia registró las tasas de desempleo más altas en 2000. Eso quiere decir que el país está repitiendo la misma experiencia de dicha recesión y que el empleo sólo se recuperará cuando se consolide el crecimiento en el año 2011; por ahora, la tendencia del desempleo es creciente.

Ahora bien, a la difícil situación de la economía, y de la industria en particular, se le suma la difícil situación con Venezuela. Además de repetir la misma situación de la recesión pasada, el mercado laboral está absorbiendo no sólo a las amas de casa y a los estudiantes que están en temporada de vacaciones, sino a los colombianos que están regresando de Venezuela.

En este sentido es muy probable que las ciudades cercanas a la frontera con el vecino país empiecen a verse afectadas. En el caso particular de Bucaramanga, cuya tasa de desempleo es una de las más bajas, es de esperar que sienta los efectos, principalmente, en el sector comercio. La misma suerte correrán ciudades como Cúcuta, Valledupar, Riohacha y otras de la Costa Atlántica, cuyos lazos con Venezuela han sido muy estrechos.

De otro lado, es de esperar que la recuperación de empleo sólo se empiece a percibir al finalizar 2010 o a comienzos de 2011. A partir de ese año la economía colombiana deberá crecer a tasas superiores al 6%, por lo menos durante tres años consecutivos para marcar cifras de un solo dígito. Es decir, que, siendo optimistas, Colombia volverá a vivir tasas de desempleo inferiores al 10% sólo en 2014.

Para ello el país deberá contar con políticas proactivas de generación de empleo, dado que el solo crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) es insuficiente, así quedó demostrado en 2007 cuando el país creció a tasas superiores al 7% y no se creó empleo. La política oficial se ha concentrado en favorecer la sustitución de trabajo por tecnología, computadores y máquinas automáticas que conllevan a contratar menos personas.

Por último, al revisar los datos entregados por el DANE, donde la agricultura fue el sector que más contribuyó al crecimiento de la población ocupada, queda el interrogante sobre si el país aún está en cosecha. La duda surge porque tradicionalmente éstas no son tan largas.

*Profesor de la Universidad Nacional, experto en temas laborales

Aunque para octubre de este año la tasa de desempleo nacional llegó a 11,5%, equivalente a 1,4 puntos porcentuales más que el mismo mes de 2008, para enero del próximo año la desocupación podría superar el 14%.

Tradicionalmente, en enero se registra la tasa de desocupación laboral más alta, mientras que el mes de diciembre normalmente registra la tasa más baja, debido a la creación de empleo estacional durante la temporada de Navidad y Año Nuevo.

Ahora bien, cuando el DANE entregue los datos de diciembre no se puede perder de vista que los resultados ‘positivos’ no expresarán la resolución de los problemas estructurales en materia de empleo, lo cual sólo ocurrirá cuando se consolide la recuperación económica. Es decir, habrá que esperar entre seis meses y un año, porque el ajuste en materia de empleo no es automático.

Es importante tener en cuenta que tras la recesión de 1999, Colombia registró las tasas de desempleo más altas en 2000. Eso quiere decir que el país está repitiendo la misma experiencia de dicha recesión y que el empleo sólo se recuperará cuando se consolide el crecimiento en el año 2011; por ahora, la tendencia del desempleo es creciente.

Ahora bien, a la difícil situación de la economía, y de la industria en particular, se le suma la difícil situación con Venezuela. Además de repetir la misma situación de la recesión pasada, el mercado laboral está absorbiendo no sólo a las amas de casa y a los estudiantes que están en temporada de vacaciones, sino a los colombianos que están regresando de Venezuela.

En este sentido es muy probable que las ciudades cercanas a la frontera con el vecino país empiecen a verse afectadas. En el caso particular de Bucaramanga, cuya tasa de desempleo es una de las más bajas, es de esperar que sienta los efectos, principalmente, en el sector comercio. La misma suerte correrán ciudades como Cúcuta, Valledupar, Riohacha y otras de la Costa Atlántica, cuyos lazos con Venezuela han sido muy estrechos.

De otro lado, es de esperar que la recuperación de empleo sólo se empiece a percibir al finalizar 2010 o a comienzos de 2011. A partir de ese año la economía colombiana deberá crecer a tasas superiores al 6%, por lo menos durante tres años consecutivos para marcar cifras de un solo dígito. Es decir, que, siendo optimistas, Colombia volverá a vivir tasas de desempleo inferiores al 10% sólo en 2014.

Para ello el país deberá contar con políticas proactivas de generación de empleo, dado que el solo crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) es insuficiente, así quedó demostrado en 2007 cuando el país creció a tasas superiores al 7% y no se creó empleo. La política oficial se ha concentrado en favorecer la sustitución de trabajo por tecnología, computadores y máquinas automáticas que conllevan a contratar menos personas.

Por último, al revisar los datos entregados por el DANE, donde la agricultura fue el sector que más contribuyó al crecimiento de la población ocupada, queda el interrogante sobre si el país aún está en cosecha. La duda surge porque tradicionalmente éstas no son tan largas.

*Profesor de la Universidad Nacional, experto en temas laborales