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El Código Civil ha sido un recurso inagotable para las historias que cuenta Bobby Delgado en sus canciones. Con ese texto, que podría considerarse frío y escueto, el artista nacido en República Dominicana ha logrado nutrir su creatividad y estimulado su mente para estructurar de una manera más efectiva lo que quiere decir en sus versos. Tal vez por eso se formó como abogado, mientras que la aproximación a la música la ha realizado a partir del instinto y su máxima fórmula se traduce en experimentos puestos en marcha a través de la dupla mágica del ensayo y el error.
Delgado no discrimina textos a la hora de alimentar la creatividad del artista. Por fortuna para él, la carrera jurídica le ha brindado la estructura y la estabilidad económica suficientes para poder vivir para cantar y no tener que cantar para vivir. Por eso nunca le ha hecho apología al estilo hippie en la música. Es simplemente un cantautor complacido con la palabra y respaldado por un ejercicio vital del que no recuerda un punto de partida específico.
“Crecí en un hogar de músicos aficionados, por tanto, recuerdo ver guitarras esparcidas por todos los rincones de la casa. Es un instrumento con el cual siento absoluta confianza y complicidad. Al piano lo conocí después, cuando mi padre le regaló uno a mi hermana de cumpleaños. Con todo el descaro del mundo lo secuestré (hasta el sol de hoy). Sin embargo nunca tomé clases de música y ellos mismos se encargaron de revelarme algunos de sus secretos”, cuenta Bobby Delgado, quien se presentó con éxito en el Primer Festival de Cantautores en Uruguay y además fue el invitado para abrir varios conciertos durante la gira Dos pájaros contraatacan, de los españoles Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina, dos de sus máximos ídolos.
Para este artista dominicano, lo importante no es la historia en sí, sino la manera como está narrada. Se pueden abordar temas cotidianos de amor, desamor, consuelo, tristeza, alegría, esperanza, reflexión, y hasta aspectos existenciales, pero por más original que sea la idea, si no se tienen las herramientas y los códigos necesarios para expresarla, es probable que el relato pase sin pena ni gloria.
“Para mi debut discográfico, Nueve crónicas del alba y una pequeña canción, tuve muchos temas guardados en la mesita de noche esperando ver la luz. Así fue que al cumplir 33 años me dijo mi madre: ‘Es un pecado que tengas todo eso ahí escondido’. Una tarde, saliendo del juzgado, llamé a un amigo que ya había grabado un disco y le pedí que me ayudara a armar el muñeco, luego de haber seleccionado 10 temas”, dice el artista.
Bobby Delgado confiesa que grabó el registro de forma artesanal, con total ingenuidad y sin ninguna pretensión mayor que regalarlo a sus amigos. Sin embargo, por aquellas cosas atribuidas al azar selectivo o por una suerte de conspiración cósmica, se han vendido miles de ejemplares y se han realizado múltiples descargas digitales sin ninguna otra promoción que el denominado voz a voz.
“Siempre he detestado los estereotipos. Digamos que no existe nada más atractivo para el público que un artista impredecible. Soy isleño y recibo un bombardeo constante de ritmos y géneros, y esta es la pasta de la cual estoy hecho. Por eso compongo en muchos géneros y estilos, quizá pecando un poco de ingenuo desde una perspectiva comercial, pero es lo que me hace feliz y esto al final es lo más importante”, afirma el dominicano que ha liderado propuestas complejas como el espectáculo Rock Sinfónico y presentaciones de corte intimista como A guitarrazo limpio.
El trabajo de Bobby Delgado incluye la interpretación de diversos estilos como la balada, el swing, el flamenco, algunos aires antillanos y manifestaciones cercanas al rock. La música por lo general va respaldada por letras cargadas de sarcasmo e ironía, como Dígame usted por quién votar, tema compuesto a raíz de unas revueltas sociales acontecidas en América Latina y que son fruto de la apatía y el descontento generalizado hacia la clase política dominante.
(Zoz)Obras (in)completas: (des)Conciertos sólo para inmensas minorías es el título de la obra cumbre de este artista dominicano, que después de la invitación que le hizo la Fundación Colombia Herida para liderar algunas actividades culturales al lado del maestro Nicoyembe y el Ballet Folclórico Colombiano, piensa entrar nuevamente al estudio de grabación para complacer a tres de sus personajes favoritos: Robin Hood, Dorian Gray y el Lobo Feroz.
Bobby Delgado es uno de los invitados al concierto que se realizará hoy a partir de las 6:00 p.m. en la Plaza de los Héroes Caídos, en el CAN, en Bogotá. Entrada gratuita.
jpiedrahita@elespectador.com