Noticias

Últimas Noticias

    Política

    Judicial

      Economía

      Mundo

      Bogotá

        Entretenimiento

        Deportes

        Colombia

        El Magazín Cultural

        Salud

          Ambiente

          Investigación

            Educación

              Ciencia

                Género y Diversidad

                Tecnología

                Actualidad

                  Reportajes

                    Historias visuales

                      Colecciones

                        Podcast

                          Opinión

                          Opinión

                            Editorial

                              Columnistas

                                Caricaturistas

                                  Lectores

                                  Blogs

                                    Suscriptores

                                    Recomendado

                                      Contenido exclusivo

                                        Tus artículos guardados

                                          Somos El Espectador

                                            Estilo de vida

                                            La Red Zoocial

                                            Gastronomía y Recetas

                                              La Huerta

                                                Moda e Industria

                                                  Tarot de Mavé

                                                    Autos

                                                      Juegos

                                                        Pasatiempos

                                                          Horóscopo

                                                            Música

                                                              Turismo

                                                                Marcas EE

                                                                Colombia + 20

                                                                BIBO

                                                                  Responsabilidad Social

                                                                  Justicia Inclusiva

                                                                    Desaparecidos

                                                                      EE Play

                                                                      EE play

                                                                        En Vivo

                                                                          La Pulla

                                                                            Documentales

                                                                              Opinión

                                                                                Las igualadas

                                                                                  Redacción al Desnudo

                                                                                    Colombia +20

                                                                                      Destacados

                                                                                        BIBO

                                                                                          La Red Zoocial

                                                                                            ZonaZ

                                                                                              Centro de Ayuda

                                                                                                Newsletters
                                                                                                Servicios

                                                                                                Servicios

                                                                                                  Empleos

                                                                                                    Descuentos

                                                                                                      Idiomas

                                                                                                      Cursos y programas

                                                                                                        Más

                                                                                                        Cromos

                                                                                                          Vea

                                                                                                            Blogs

                                                                                                              Especiales

                                                                                                                Descarga la App

                                                                                                                  Edición Impresa

                                                                                                                    Suscripción

                                                                                                                      Eventos

                                                                                                                        Pauta con nosotros

                                                                                                                          Avisos judiciales

                                                                                                                            Preguntas Frecuentes

                                                                                                                              Contenido Patrocinado
                                                                                                                              05 de junio de 2016 - 09:02 p. m.

                                                                                                                              ¿De Candelaria a candileja?

                                                                                                                              El centro de Medellín goza de una intención interesante: una amalgama pública, privada y común tiene el propósito de conferir al espacio un pulso vital a cambio de que no agonice.

                                                                                                                              Manuela Saldarriaga Hernández

                                                                                                                              El centro de Medellín, un lugar para todos, una amalgama de gustos.
                                                                                                                              Foto: Checho

                                                                                                                              Este mes cumplo 500 días viviendo en el centro de Medellín. No vigilo el calendario ni cuento los pasos, mucho menos llevo reloj en la muñeca, pero 500 días es la mitad de una guerra del siglo XX en Colombia y media milésima de mi vida ordinal. Cuando los sume estaré viviendo en un lugar, también en el centro, situado entre una sala de velación, una funeraria y una iglesia, y así los muertos habrán de despertarme. Desde la ventana de este espacio exequial veo la Basílica Metropolitana y pienso en su museo no abierto al público con obras pictóricas y escultóricas, y rezo por el órgano alemán que guardan y que pesa una veintena de toneladas, y que para estar ahí viajó por las aguas del río Magdalena, una gran fosa común de este país. Volteo y está frente a mis ojos el edificio de los Espejos reflejando una puesta de sol y el edificio Coltejer, al que cerca de 500 días atrás persigo en una ronda circunvalar. Y me gusta lo que veo. Estoy en el lugar con mayor número de habitantes de todas las comunas entre residentes y población flotante.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              Decidí vivirlo sin miedo, de noche y de día, pese a ser la zona líder en el rango de hurtos y extorsiones, y donde más homicidios ocurren en contraste con toda la ciudad. Temo más, sin embargo, al tránsito callejero en el sur, por el exceso de soledad. La salida y puesta de sol la anuncian con una algarabía fascinante una bandada de pericos que viaja por la parte más arborizada de la Avenida Oriental y, de hecho, es en el centro en donde las aves más pequeñas pueden ser avistadas y donde hay más tráfico montés. Un estudio no muy reciente afirmó la existencia de más de 32.000 árboles en el centro con cerca de 500 especies distintas, y es en medio de ceibas, guayacanes blancos, rosados y amarillos, palmas reales, piñones de oreja, algarrobos y acacias, que se alza la fragancia tóxica convirtiendo este punto en el más contaminado.

                                                                                                                              El centro, un coctel de pasado y presente, tiene una hora maga: las 4:00 a.m. Están quienes acaban la noche y parten, quienes comienzan el día y arriban, y quienes van de paso y sólo pasan. En la oscuridad escucho la coral de ratas. Aprendí a no rehuirles. Cuando el día es diáfano, se esconden entre nosotros algunas bestias y los árboles son nidos alados. Las cantinas cierran y las panaderías abren, el transporte público abunda en las calles y el centro es la arteria atrofiada del corazón vial de Medellín. La estética ecléctica en la que resido me encanta. Las ménsulas, balaustradas, cornisas y pináculos de los inmuebles patrimoniales combinan extrañamente con los bloques tuguriales. Las marchas magisteriales, canábicas y de campesinos que se toman cada tanto al año las calles, aumentando el caos vehicular, exigen tomar rutas alternas, para los de a pie, con el cemento como vitrina de tapetes de frutas y de flores, indígenas desplazados, clubes de jugarretas y una suerte de desplome de dardos y flores. Para la actual administración, y para la pasada, es área de intervención estratégica. Según el Plan de Ordenamiento Territorial, harán una renovación urbanística desde el espacio público y el transporte, y mejorarán el orden público y la seguridad. Es cierto que peatonalizarán Córdoba y La Playa e igualmente adecuarán ciclorrutas, no obstante, la intención institucional no sólo no debe ser intermitente, debe ser resonante y con un buen eco a cambio de no ser ruidosa. El estímulo del uso de bicicleta en Medellín no es prioritario, es urgente, y debe ser tenido en cuenta, tal vez, como estrategia de salud pública. Son cuatro estaciones de Metro las aledañas, más un tranvía, suficientes para llenar con feligreses cada púlpito de 13 iglesias que hay en el sector.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              El antropólogo Manuel Delgado, que estuvo en el centro en un ambiente de diálogo ciudadano, no cree en el concepto de espacio público, defiende a cambio el de “espacio colectivo”. Siendo esta comuna la madriguera de museos, centros de interés cultural, universidades, guarida del archivo histórico, abundante en escultórica y arqueología (de lo que existe inventario), habitación de un cabildo indígena (Chibcariwak), asilo de una Unidad de Vida Articulada (UVA) y de una escuela de música (...). Territorio de moradas con prácticas colaborativas como Taller 7, Plazarte, Casa Tres Patios, Casa Imago y Taller Darién, también foco de atención de cerca de 15 proyectos nómadas con vocación de intervenciones artísticas y ahora núcleo de un evento de ciudad, donde más de 50 entidades se desvisten de su logo para destacar un encanto; merece atención y ser manivela de una cultura acústica. No se me olvida que Borges estuvo aquí.

                                                                                                                              Y el centro, que tiene su propio mirador en el cementerio San Lorenzo, no puede ser víctima de la belleza cambiando la jerarquía de la agenda setting al dejar de lado las ollas de vicio en Niquitao, Calibío y De Greiff, la prostitución infantil, la decadencia de bienes patrimoniales, las explosiones, homicidios y robos; los expendios de drogas y plazas de vicio (custodiados), la limpieza social, entre tanto, como el número excesivo de venteros informales, a cambio de generar favorabilidad aun cuando muchos ciudadanos no reconocen la estrecha cartografía y anárquica naturaleza del sitio.

                                                                                                                              El que se llene la Plaza Botero con cientos de asistentes a un evento del Museo de Antioquia -Patio sonoro-, con el que las calles se vieron populosas en la noche; el que las esculturas de ese parque amanezcan con tapabocas por iniciativa de la Ciudad Verde y Low Carbon City como una súplica pacífica de atención al tema, el que cinco estatuas insignes se vistan de retro y futurista con el proyecto Steampunk, el que confluya tanta gente del sur al Camellón Guanteros, a saber La Pascasia, el que haya una plataforma para que se aporten ideas sobre qué es lo soñado para el lugar, el que los bares se conviertan en escenarios de aula, el que exhiban fotografías en gran formato en las fachadas de un vecindario, el que se reactiven edificios como lugares propicios para talleres de co-creación y recintos de exposiciones plásticas, es poderoso, por supuesto. Para que esto y lo que ignoro logre su cometido, decía un amigo, necesitamos que la cosa se sedimente. Nuestro centro tiene que parecerse a lo que somos, tanto cosmético no embellece. El artificio engaña.

                                                                                                                              Veo miles de monjes con capucha monástica y otros cuantos que están desnudos, sosteniendo en sus manos una cerilla para frotar contra el asfalto y hacer del centro una explosión artificial, con contadas luces de bengala, o una hoguera que de verdad caliente y resista. La Comuna 10 de Medellín, La Candelaria, está llena de combustible: un Guayaquil aumentado -y deliberado-, pedagógico, performático, institucional, diverso e interesante, con cuánto contraste, está a punto de ser gestado si la fogata se alimenta como es debido. Al fuego, para que no se apague, se le sopla suavemente.

                                                                                                                              El centro de Medellín, un lugar para todos, una amalgama de gustos.
                                                                                                                              Foto: Checho

                                                                                                                              Este mes cumplo 500 días viviendo en el centro de Medellín. No vigilo el calendario ni cuento los pasos, mucho menos llevo reloj en la muñeca, pero 500 días es la mitad de una guerra del siglo XX en Colombia y media milésima de mi vida ordinal. Cuando los sume estaré viviendo en un lugar, también en el centro, situado entre una sala de velación, una funeraria y una iglesia, y así los muertos habrán de despertarme. Desde la ventana de este espacio exequial veo la Basílica Metropolitana y pienso en su museo no abierto al público con obras pictóricas y escultóricas, y rezo por el órgano alemán que guardan y que pesa una veintena de toneladas, y que para estar ahí viajó por las aguas del río Magdalena, una gran fosa común de este país. Volteo y está frente a mis ojos el edificio de los Espejos reflejando una puesta de sol y el edificio Coltejer, al que cerca de 500 días atrás persigo en una ronda circunvalar. Y me gusta lo que veo. Estoy en el lugar con mayor número de habitantes de todas las comunas entre residentes y población flotante.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              Decidí vivirlo sin miedo, de noche y de día, pese a ser la zona líder en el rango de hurtos y extorsiones, y donde más homicidios ocurren en contraste con toda la ciudad. Temo más, sin embargo, al tránsito callejero en el sur, por el exceso de soledad. La salida y puesta de sol la anuncian con una algarabía fascinante una bandada de pericos que viaja por la parte más arborizada de la Avenida Oriental y, de hecho, es en el centro en donde las aves más pequeñas pueden ser avistadas y donde hay más tráfico montés. Un estudio no muy reciente afirmó la existencia de más de 32.000 árboles en el centro con cerca de 500 especies distintas, y es en medio de ceibas, guayacanes blancos, rosados y amarillos, palmas reales, piñones de oreja, algarrobos y acacias, que se alza la fragancia tóxica convirtiendo este punto en el más contaminado.

                                                                                                                              El centro, un coctel de pasado y presente, tiene una hora maga: las 4:00 a.m. Están quienes acaban la noche y parten, quienes comienzan el día y arriban, y quienes van de paso y sólo pasan. En la oscuridad escucho la coral de ratas. Aprendí a no rehuirles. Cuando el día es diáfano, se esconden entre nosotros algunas bestias y los árboles son nidos alados. Las cantinas cierran y las panaderías abren, el transporte público abunda en las calles y el centro es la arteria atrofiada del corazón vial de Medellín. La estética ecléctica en la que resido me encanta. Las ménsulas, balaustradas, cornisas y pináculos de los inmuebles patrimoniales combinan extrañamente con los bloques tuguriales. Las marchas magisteriales, canábicas y de campesinos que se toman cada tanto al año las calles, aumentando el caos vehicular, exigen tomar rutas alternas, para los de a pie, con el cemento como vitrina de tapetes de frutas y de flores, indígenas desplazados, clubes de jugarretas y una suerte de desplome de dardos y flores. Para la actual administración, y para la pasada, es área de intervención estratégica. Según el Plan de Ordenamiento Territorial, harán una renovación urbanística desde el espacio público y el transporte, y mejorarán el orden público y la seguridad. Es cierto que peatonalizarán Córdoba y La Playa e igualmente adecuarán ciclorrutas, no obstante, la intención institucional no sólo no debe ser intermitente, debe ser resonante y con un buen eco a cambio de no ser ruidosa. El estímulo del uso de bicicleta en Medellín no es prioritario, es urgente, y debe ser tenido en cuenta, tal vez, como estrategia de salud pública. Son cuatro estaciones de Metro las aledañas, más un tranvía, suficientes para llenar con feligreses cada púlpito de 13 iglesias que hay en el sector.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              El antropólogo Manuel Delgado, que estuvo en el centro en un ambiente de diálogo ciudadano, no cree en el concepto de espacio público, defiende a cambio el de “espacio colectivo”. Siendo esta comuna la madriguera de museos, centros de interés cultural, universidades, guarida del archivo histórico, abundante en escultórica y arqueología (de lo que existe inventario), habitación de un cabildo indígena (Chibcariwak), asilo de una Unidad de Vida Articulada (UVA) y de una escuela de música (...). Territorio de moradas con prácticas colaborativas como Taller 7, Plazarte, Casa Tres Patios, Casa Imago y Taller Darién, también foco de atención de cerca de 15 proyectos nómadas con vocación de intervenciones artísticas y ahora núcleo de un evento de ciudad, donde más de 50 entidades se desvisten de su logo para destacar un encanto; merece atención y ser manivela de una cultura acústica. No se me olvida que Borges estuvo aquí.

                                                                                                                              Y el centro, que tiene su propio mirador en el cementerio San Lorenzo, no puede ser víctima de la belleza cambiando la jerarquía de la agenda setting al dejar de lado las ollas de vicio en Niquitao, Calibío y De Greiff, la prostitución infantil, la decadencia de bienes patrimoniales, las explosiones, homicidios y robos; los expendios de drogas y plazas de vicio (custodiados), la limpieza social, entre tanto, como el número excesivo de venteros informales, a cambio de generar favorabilidad aun cuando muchos ciudadanos no reconocen la estrecha cartografía y anárquica naturaleza del sitio.

                                                                                                                              El que se llene la Plaza Botero con cientos de asistentes a un evento del Museo de Antioquia -Patio sonoro-, con el que las calles se vieron populosas en la noche; el que las esculturas de ese parque amanezcan con tapabocas por iniciativa de la Ciudad Verde y Low Carbon City como una súplica pacífica de atención al tema, el que cinco estatuas insignes se vistan de retro y futurista con el proyecto Steampunk, el que confluya tanta gente del sur al Camellón Guanteros, a saber La Pascasia, el que haya una plataforma para que se aporten ideas sobre qué es lo soñado para el lugar, el que los bares se conviertan en escenarios de aula, el que exhiban fotografías en gran formato en las fachadas de un vecindario, el que se reactiven edificios como lugares propicios para talleres de co-creación y recintos de exposiciones plásticas, es poderoso, por supuesto. Para que esto y lo que ignoro logre su cometido, decía un amigo, necesitamos que la cosa se sedimente. Nuestro centro tiene que parecerse a lo que somos, tanto cosmético no embellece. El artificio engaña.

                                                                                                                              Veo miles de monjes con capucha monástica y otros cuantos que están desnudos, sosteniendo en sus manos una cerilla para frotar contra el asfalto y hacer del centro una explosión artificial, con contadas luces de bengala, o una hoguera que de verdad caliente y resista. La Comuna 10 de Medellín, La Candelaria, está llena de combustible: un Guayaquil aumentado -y deliberado-, pedagógico, performático, institucional, diverso e interesante, con cuánto contraste, está a punto de ser gestado si la fogata se alimenta como es debido. Al fuego, para que no se apague, se le sopla suavemente.

                                                                                                                              Por Manuela Saldarriaga Hernández

                                                                                                                              Ver todas las noticias
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
                                                                                                                              Aceptar