Publicidad

Canciones de carácter colectivo

Después de diez años de trabajar por primera vez con el productor argentino Tweety González, la banda caleña restablece el vínculo para elaborar su nuevo material.

Juan Carlos Piedrahíta B.
28 de junio de 2014 - 02:11 a. m.
Los integrantes de la banda Superlitio aseguran que querían hacer un disco de estilo nocturno, aunque no ligado a la rumba.  / Archivo particular
Los integrantes de la banda Superlitio aseguran que querían hacer un disco de estilo nocturno, aunque no ligado a la rumba. / Archivo particular

El productor argentino Tweety González les quitó un piano de encima a los integrantes de Superlitio. Ellos tenía un material virgen para entrar al estudio de grabación, más de 18 canciones marcaban su derrotero y la intención de la banda era incluirlas todas para complacer al público que llevaba esperando algo más de tres años un nuevo grito musical.

Sobre el mantel estaba la posibilidad de estrechar el vínculo entre todas esas creaciones melódicas y un concepto tan gráfico como vital que mostrara una propuesta llena de texturas y varios guiños a lo nocturno, sin suscribir esa atmósfera a un terreno de rumba, a una invitación fiestera.

En eso estaban de acuerdo todos los integrantes del grupo, pero a pesar de que querían realizar un trabajo discográfico que respondiera solamente a sus expectativas, no lograban sintonizarse en otros aspectos determinantes para la realización de un disco y su posterior impacto. Fue ahí cuando apareció la figura de Tweety González, quien produjo para la banda el álbum Tripping Tropicana en 2005.

“Con el disco Nocturna, que acabamos de lanzar, pasó que no supimos en dónde estaba el concepto, y llegó Tweety González a ubicarnos y ahora estamos muy contentos con todo el proceso. Teníamos la meta de hacer registros conceptuales porque sentimos que, con el fenómeno del mp3, los álbumes perdieron mucho peso dentro del mercado musical. Sin embargo, nosotros queremos exhibir nuestras canciones pegadas a una idea para crear una atmósfera sensible, y en ese proceso fue importante la visión de quien se ha convertido en nuestro asesor permanente”, cuentan los músicos de Superlitio, una banda que se formó en Cali en 1996 y que tiene ya siete producciones discográficas.

Para Pedro Rovetto (bajo), Pipe Bravo (teclas, guitarra y voz), Alejandro Lozano (guitarra líder), Armando González (batería) y Dino Agudelo (secuencias y mezclas), hacer discos es como entrar en una nueva etapa de la banda. Sienten que el colectivo de canciones los condiciona para apropiarse de la actualidad del grupo, sin ahondar en temas complejos como la falta de difusión de su música en las radios comerciales.

“En este disco el piano llega a ser muy protagonista, como no pasaba hace varios años. Antes eran las guitarras y pasamos también por programaciones para crear el ambiente de las texturas, que le permite a la gente realizar un viaje musical y tenernos a nosotros como sus pilotos. Con la tecnología hemos logrado mutar mucho y eso hace parte de la evolución. Desde el primer disco hay intentos de incorporar secuencias y programaciones, y con los años hemos ido perfeccionando el estilo, lo que se hace evidente en Nocturna”, dicen los jóvenes de Superlitio.

La banda defiende la existencia de una propuesta musical diseñada para mucho más que posicionar sencillos. El concepto es lo que realmente importa aquí, y con él los integrantes se sienten capaces de diseñar un planeta que gire a su compás.

 

jpiedrahita@elespectador.com

Por Juan Carlos Piedrahíta B.

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar