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Mujeres con los pies en la tierra

La periodista santandereana le sacó tiempo a sus ocupaciones en CNN en Español para dirigir una edición especial en la que resaltó siete historias de mujeres colombianas que aportan a la construcción de un país más equitativo y transparente.

El Espectador
15 de noviembre de 2015 - 03:43 a. m.
Ángela Patricia Janiot frente a su casa en Atlanta, donde vive hace más de una década como presentadora de CNN en Español. / Miguel Gutiérrez
Ángela Patricia Janiot frente a su casa en Atlanta, donde vive hace más de una década como presentadora de CNN en Español. / Miguel Gutiérrez

Con más de 18 años de experiencia como presentadora de CNN en Español, Ángela Patricia se embarcó, hace un par de meses, en la aventura de dirigir, por primera vez, un medio impreso. Y lo hizo aceptando la invitación de CROMOS, a sabiendas de que lo haría a control remoto, desde Atlanta, donde vive hace más de una década, o desde el lugar del mundo donde estuviera haciendo las coberturas habituales de los hechos políticos del momento.

El primer encuentro para hacer realidad este proyecto fue hace un par de meses en la Bucaramanga que la vio nacer hace 52 años. En uno de esos viajes relámpago, pero cada vez más frecuentes (para saludar a la familia), escuchó la propuesta y la aceptó sin dudar. Y empezó a marcar el derrotero de lo que sería esta revista especial. Dejó claro que quería una publicación que destacara a mujeres colombianas con historias inspiradoras, mujeres que tuvieran cosas que contarle al país y que dieran ejemplo de esfuerzo, honestidad y compromiso.

“Esta propuesta me llegó en un momento muy activo, por procesos electorales cruciales como la segunda vuelta electoral en Argentina, donde el candidato opositor tiene buenas posibilidades de triunfo y podría acabar con doce años de gobierno kirchnerista, o las legislativas en Venezuela, en las que el oficialismo se juega la mayoría en la Asamblea Nacional y es posible que la oposición pueda armar sus mayorías”, dice Ángela.

Ese es su tema, la coyuntura política de la región. Y mientras se alista para cubrir la segunda vuelta presidencial argentina y dedica sus análisis a la posibilidad de que un triunfo de la oposición venezolana abra la puerta para un referendo revocatorio o la posibilidad de modificar las leyes que se han aprobado en medio de poderes especiales, también habla con emoción de las siete mujeres que eligió para que protagonizaran la edición especial de CROMOS.

“Los temas que escogimos son universales, las siete mujeres que elegimos son referentes en temas comunes a todos los países en la región. El criterio para elegirlas fue eminentemente periodístico, como cuál es la historia de mayor impacto, cuál es la protagonista que más gente compromete con su trabajo”, explicó.

Para Ángela, esta revista, que estará en circulación a partir de esta semana, significa una feliz coincidencia con un libro que está preparando. No avanza mucho en la idea, pero habla de un texto útil para que las mujeres tomen decisiones asertivas en su vida.

Las mujeres inspiradoras

“Las elegidas para la edición especial de CROMOS –enfatiza Ángela– son mujeres valiosas que han hecho labores únicas, que han dejado huella, como Nubia Muñoz, nuestra científica caleña que trabajó durante varias décadas para conseguir una vacuna contra el virus del papiloma humano, o Elisabeth Ungar, quien ha liderado iniciativas para que nuestros gobernantes rindan cuentas a sus electores. Ella nos da herramientas a los colombianos para ser ciudadanos activos para exigir transparencia y decirles a los políticos que ellos nos tienen que servir”.

Pero también destaca a las mujeres que trabajan como agentes de cambio social. “Me conmovieron estas mujeres que trabajan con víctimas de abusos sexuales en el conflicto o de violencia familiar, un mal endémico en la región”, dice al referirse a Claudia Mejía, directora de Sisma Mujer, una organización feminista y defensora de derechos humanos. “Es de una inspiración que conmueve, empodera a las demás, demuestra que sí se puede cambiar el país”, concluye.

Y destaca la conversación intensa, profunda y filosófica que sostuvieron la escritora Piedad Bonnett y la médica Elsa Lucía Arango sobre la posibilidad de comunicarse con seres que están en otras dimensiones. De ese encuentro, Ángela destaca que fue un ejercicio de contraste, de aplicar herramientas de periodismo equilibrado, transparente, genuino y con altura.

“Yo quería tocar este tema porque estoy viviendo una etapa de mi vida que me invita a cuestionarme y hacer preguntas. Quiero profundizar mi espiritualidad”, dice Ángela, quien hace poco perdió a su padre, el exjugador de fútbol argentino Roberto Pablo Janiot.

La fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia, Alexandra Ladino, fue otra de las mujeres que protagonizaron esta edición especial y que fue elegida por Ángela Patricia porque su historia muestra cómo se tuvo que abrir camino, hombro a hombro, en un medio muy masculino. “Ella tiene una historia de fuerza y dedicación. Ella está juzgando a algunos de los hombres más poderosos del país (investiga el caso Interbolsa y tuvo procesos por falsos positivos, además de una denuncia interpuesta por el senador Álvaro Uribe contra el presidente Juan Manuel Santos). “Pero además está haciendo transformaciones importantes en la Fiscalía, está dejando huella”, dice con entusiasmo.

Uno de los temas en los que más insistió Ángela Patricia fue entregar una lección práctica a las mujeres para negociar los temas inherentes a las relaciones de pareja. Para ella, este es un aspecto de la vida que las mujeres han tenido pendientes desde hace décadas, porque no están acostumbradas a decidir. Y para ello eligió a la sicóloga y abogada Carmen Larrazábal, quien se refiere con claridad a la necesidad de que las mujeres hablen con sus parejas de puntos claves como dónde pasar las fiestas de fin de año, qué pasa cuando hay un hijo fuera del matrimonio, cómo distribuimos los gastos del hogar.

Ángela reconoce que solo tuvo una notoria parcialidad, al solicitar que en la lista estuviera una santandereana. “Y la que encontramos representa claramente el valor que yo quería mostrar: Nora Lozza es una mujer exitosa en la moda y en la empresa, es una fiel representante del talante de las santandereanas”, dice con orgullo.

“Al final del ejercicio –dice– queda un mensaje de que las mujeres somos ejemplo de ética, coraje, valentía, de que somos capaces de hacernos escuchar con respeto, de que hacemos las cosas bien y somos capaces de cambiar el estado actual de las cosas”.

Una vez finalizado el cierre de esta edición de 210 páginas, con una propuesta gráfica moderna y femenina, Ángela nos anticipa que está trabajando en un nuevo formato de programa, en el que tendré más tiempo para contar cosas que nos conmueven, que nos inspiran y que no caben en un noticiero.

 

Por El Espectador

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