Brad Pitt y Angelina Jolie preparan boda exótica para sus invitados

Debido a que su enlace podría celebrarse el próximo mayo, la conocida pareja de actores ya está ultimando los detalles para que su boda sea totalmente memorable. Así, además de darse el sí quiero en la capilla ubicada en su castillo de Miraval, al sur de Francia, Brad y Angelina quieren decorarla con plantas podadas con formas de elefantes, que representarían a cada uno de los miembros de su gran familia, además de contar con la mejor luz del día, motivo por el que han elegido casarse durante el atardecer.

"En su trayecto de tres kilómetros hasta la casa, los invitados conducirán al lado de fuentes y de ponis de Shetland que estarán trotando en el camino. Cuando estacionen, verán a la familia de plantas con formas de elefantes.

Brad espera que los haga sonreír. Al parecer, la idea de los elefantes fue de los niños y quieren que la ceremonia tenga lugar justo antes del atardecer, para que en el momento en el que se den el sí quiero, toda la iglesia esté cubierta de una luz rojiza y anaranjada. Por otro lado, el jardín tiene un nuevo sistema de aspersores, por lo que durante el gran día estará precioso, de un verde exuberante. Brad quiere que los invitados se queden anonadados en el momento en que los vean entrar por la puerta", declaró la florista de la boda, Lucille Michele, a la edición británica de la revista Grazia.

Además, el actual prometido de Angelina Jolie ha querido asegurarse personalmente de que el escenario de su segunda boda se mantendrá como un legado para sus descendientes. Por ello, solo ha querido sembrar las plantas silvestres que normalmente se ven en la región y ha pedido que no se modifique la naturaleza de lugar.

"Brad voló al lugar hace dos semanas, y le ha dado instrucciones muy precisas a un equipo de ocho jardineros, además de ideas para nuevas plantaciones que ha diseñado él mismo. Brad quiere saber qué plantan en el lugar para colaborar con la naturaleza local y mantenerla durante generaciones. Gastará en la región más de 35.000 euros (45.600 dólares) en plantas, y ha decidido no cortar flores, solo sembrar plantas silvestres para que en un futuro sus bisnietos puedan ver cómo era el lugar en el que ambos se casaron", explicó. 

Debido a que su enlace podría celebrarse el próximo mayo, la conocida pareja de actores ya está ultimando los detalles para que su boda sea totalmente memorable. Así, además de darse el sí quiero en la capilla ubicada en su castillo de Miraval, al sur de Francia, Brad y Angelina quieren decorarla con plantas podadas con formas de elefantes, que representarían a cada uno de los miembros de su gran familia, además de contar con la mejor luz del día, motivo por el que han elegido casarse durante el atardecer.

"En su trayecto de tres kilómetros hasta la casa, los invitados conducirán al lado de fuentes y de ponis de Shetland que estarán trotando en el camino. Cuando estacionen, verán a la familia de plantas con formas de elefantes.

Brad espera que los haga sonreír. Al parecer, la idea de los elefantes fue de los niños y quieren que la ceremonia tenga lugar justo antes del atardecer, para que en el momento en el que se den el sí quiero, toda la iglesia esté cubierta de una luz rojiza y anaranjada. Por otro lado, el jardín tiene un nuevo sistema de aspersores, por lo que durante el gran día estará precioso, de un verde exuberante. Brad quiere que los invitados se queden anonadados en el momento en que los vean entrar por la puerta", declaró la florista de la boda, Lucille Michele, a la edición británica de la revista Grazia.

Además, el actual prometido de Angelina Jolie ha querido asegurarse personalmente de que el escenario de su segunda boda se mantendrá como un legado para sus descendientes. Por ello, solo ha querido sembrar las plantas silvestres que normalmente se ven en la región y ha pedido que no se modifique la naturaleza de lugar.

"Brad voló al lugar hace dos semanas, y le ha dado instrucciones muy precisas a un equipo de ocho jardineros, además de ideas para nuevas plantaciones que ha diseñado él mismo. Brad quiere saber qué plantan en el lugar para colaborar con la naturaleza local y mantenerla durante generaciones. Gastará en la región más de 35.000 euros (45.600 dólares) en plantas, y ha decidido no cortar flores, solo sembrar plantas silvestres para que en un futuro sus bisnietos puedan ver cómo era el lugar en el que ambos se casaron", explicó.