Siente la música como nadie, tiene el don del buen maestro y es un saxofonista magnífico. Es cartagenero y creó la fundación LIVICOL – limitados visuales de Colombia- , y sí, Frank Villanueva Mieles no ve. Una enfermedad le quito la visión lentamente hasta dejarlo sumido en sombras a los 29 años. En rehabilitación, que no es otra cosa que aprender a no ver el mundo, a caminar con un bastón guía y a leer braille, conoció en carne propia las limitaciones y problemas que enfrentan los ciegos en la ciudad.
Con una fuerza inusitada hizo lo que no había hecho nadie antes en Cartagena: le enseñó a muchos ciegos a tocar instrumentos musicales gratis. Hoy está nominado en la categoría de "Cultura" en Titanes Caracol 2018.