Bradley Cooper y Robert De Niro se miden en la película de acción "Limitless", que se estrena este viernes en Estados Unidos y que plantea la posibilidad de cambiar el fracaso por el éxito tomando una revolucionaria y ultrasecreta droga.
"Esta película no es sobre drogas, es sobre poder. Ese es el punto. Sobre lo que se podría hacer con ese poder y cómo se maneja, pero no es una película sobre adicciones", dijo Cooper.
Dirigida por Neil Burger ("The Illusionist") y basada en la novela "The Darks Fields" de Alan Glynn, este provocador filme rodado en Nueva York y con algunos exteriores en Puerto Vallarta (México) se completa con la presencia de Abbie Cornish ("Bright Star"), una joven actriz australiana que empieza a pisar fuerte en Hollywood.
Cooper, de 36 años, y considerado uno de los actores llamados a ser el reemplazo generacional de los más maduros George Clooney, Brad Pitt o Tom Cruise ha tenido así la posibilidad de trabajar con De Niro, a quien siempre consideró un maestro.
"Él es una de las razones por las que quería ser actor", dijo el protagonista de "Wedding Crashers" y "The Hangover", un filme del que en mayo se estrena su secuela y que ha sido su plataforma de lanzamiento, con él la taquilla estadounidense superó los 270 millones de dólares.
Con Robert De Niro "fue todo muy bien. La verdad es que es maravilloso y lo pasé muy bien con él", dijo de su compañero, quien tuvo para él similares muestras de cariño y a quien no le importaría compartir futuros proyectos.
"Me gustó trabajar con Bradley y con Neil, fue un buen trabajo y valió la pena", señaló el ganador de dos premios Oscar por "The Godfather II" (1974) y "Raging Bull" (1980) y que en este filme encarna al multimillonario financiero Carl Van Loon, atraído por el éxito sin precedentes de Eddy Morra (Cooper).
En la treintena, Eddy es un escritor fracasado, sin motivación y con pocas perspectivas personales y profesionales cuya vida cambia de repente cuando un conocido le da una pastilla de NTZ, un fármaco nuevo y revolucionario que permite a su cerebro utilizar todo su potencial, lo que capta la atención de Van Loon y de un gángster ruso (Andrew Howard).
"Leí primero el guión, y después el libro, que me gustó mucho y es muy diferente de la película. Es similar en términos del personaje, Eddy Morra, y lo que le ocurre, pero en su conjunto es completamente diferente. No tiene nada que ver con la película", dijo el actor.
Cooper, que estudió interpretación en el Actor's Studio de Nueva York, explicó que hizo "mucha preparación antes del rodaje... Hasta comí mucha comida china, para estar hinchado, y también me preparé mucho para ponerme en la situación de tomar esa droga".
"Sí, la tomaría", respondió Cooper, incluso antes de terminar la pregunta sobre si, de existir, tomaría NTZ. De Niro, sin embargo, contestó a un grupo de periodistas con un "no sé, lo mismo...".
Sin embargo, para Abbie Cornish (Lindy) "no se puede tomar una droga sin hacer frente a las responsabilidades y a la adicción... Sin aceptar las consecuencias".
"Esta película es sobre el potencial humano, pero también sobre el poder y la carrera de Eddy por lograrlo", señaló por su parte Neil Burger, que consideró que "Limitless" es "bastante lo que es hoy en día, y cómo es Nueva York, pero también es más universal que eso. Es alguien que tiene una sed de éxitos que no logra saciar".
La guionista de la película, Leslie Dixon ("Mrs. Doubtfire", "Hairspray"), señaló que el personaje "va evolucionado a diferentes niveles de pensamiento, y nunca tiene suficiente", mientras que el De Niro hubo de ser modificado y desarrollado para que el protagonista de "Taxi Driver" lo aceptara.
"Robert está fantástico en ese papel. Es generoso y buena persona, toma un poco a Eddy bajo su ala, pero como en los mejores papeles de De Niro, hay algo un poco siniestro bajo la superficie", explicó el director de la película.
Cooper, que confiesa que le gustan "todos los papeles", "hacer cine" y dar el salto a la dirección en algún momento, se prepara para el rodaje de "The Words" y acaba de hacer una audición.