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Marion Cottillard protagonizó este jueves la segunda alfombra de la 65 edición del Festival de Cannes y subió la temperatura en una jornada fría, con un glamuroso vestido negro y una eterna sonrisa, acompañada de todo el equipo de "De rouille et d'os", que se presentó en la sección oficial. Ver fotos de la alfombra roja.
Cotillard llegó junto al director de la cinta, Jacques Audiard, que no se quitó su sombrero negro; el coprotagonista, el belga Matthias Schoenaerts, y el niño Armand Verdure, que también participa en el filme y que, a sus apenas seis años llamó la atención de todos con su pequeño esmoquin.
El gran moño que lucía la actriz francesa le impidió bailar junto al resto de sus compañeros de película en lo alto de las escaleras que dan acceso al Gran Teatro Lumière del Palacio de Festivales de Cannes.
Pero su elegancia y su sonrisa eclipsaron a sus acompañantes y a todos los que habían pasado anteriormente por la alfombra roja.
Entre ellos estaba Rossy de Palma, con un vestido color chocolate lleno de volantes, que apareció acompañada de la actriz francesa Clotilde Coureau, esposa de Filiberto de Saboya.
También Jane Fonda, Eva Longoria, Jackie Chan, María de Medeiros o Tim Roth quisieron recorrer la alfombra para presenciar el estreno oficial de "De rouille et d'os".