:format(jpeg)/www.elespectador.comhttp://thumbor-prod-us-east-1.photo.aws.arc.pub/Rpc1oRKnKP3Fahi2ev8Fopn6qrA=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/5OAMSSYZNZBODBJHXPUM5MSTEE.jpg)
El director colombiano Juan Diego Escobar presentó este martes en el Festival de Cine de Sitges su primer largometraje, "Luz", un "western" que ubica en la espesura de las montañas del país y en el que combina "poesía y terror", según explicó en rueda de prensa. (Le puede interesar: Festival de cine colombiano en Nueva York abre convocatoria 2020).
Cineasta que desde que tiene 10 años soñaba con aterrizar en Sitges, porque es un "fanático y un friki del cine de género", ahora ha podido proyectar su primera cinta en la ciudad catalana, donde relata qué sucede en una aldea perdida cuando nace un niño que es un presunto nuevo Mesías y cómo los males empiezan a azotar el lugar, donde tiene mucho peso un predicador llamado El Señor.
Debido a ello, sus tres hijas -Leila, Uma y Zion-, dos de ellas adoptadas, empezarán a cuestionar el significado de palabras como Dios, diablo o amor.
Escobar desveló que llevaba tiempo dándole vueltas al guion, pero "no encontraba la voz, hasta que tomé ayahuasca y entonces todo cambió".
El actor Jim Muñoz comentó que para poder entrar en la piel de su personaje estuvo viviendo dos meses antes del rodaje en el campo y luego, una vez en plena filmación, "aquello fue como un retiro espiritual, porque estábamos desconectados de la sociedad, en un lugar donde no había señal para el celular, ni televisión". (Puede leer: Película colombiana "Alma de Héroe" gana en el Festival de Cine de la Cultura Hispana).
Este hecho, a la vez, fue "aturdidor, porque todos estamos acostumbrados al bullicio de la ciudad, pero hicimos un viaje interesante hacia adentro, volvimos a lo básico y, a partir de ahí, nos dejamos sorprender en nuestra relación con los personajes".
Para la actriz Yuri Vargas, que es una de las hijas del predicador, el proyecto "fue maravilloso, fue internarnos en un lugar donde no existía la familia, nada de bulla, ni ruido, y los actores conectamos rápidamente".
Coincidió con Muñoz en que es la primera vez que ve que nadie del equipo de rodaje utiliza celular en su día a día.
A su juicio, Juan Diego Escobar consiguió "reunir a un equipo con ganas de mostrar el cine colombiano de género al resto del mundo".
El actor Conrado Osorio indicó que se enamoró antes de que se lo propusieran del personaje de El Señor, que calificó de "un regalo de la vida, que supondrá un antes y un después en mi carrera".
Consideró que convertirse en este hombre "fue un reto como actor, porque no tiene mi voz y es alguien mayor que yo".
Juan Diego Escobar reconoció que no ha sido fácil tirar adelante el proyecto en un momento de "dificultades para el cine latinoamericano, con pocos fondos y pocos apoyos".
Además, en este caso, con "una película tan poco comercial y difícil de ver, de género, pero intelectual, lo que dificultó encontrar fondos".
A pesar de ello, con el filme logró venir a Sitges. "Yo nunca soñé ni con un Óscar o con ir a Sundance, sino que soñaba con Sitges, consumidor voraz como soy de películas de género desde que tengo 10 años y ahora mi sueño se ha visto cumplido", concluye.