Alejandra Borrero: "Hacer teatro es un poco vivir en la cuerda floja"

Alejandra Borrero es la fundadora de Casa E. / Cortesía

Yo decidí crear Casa E porque después de tantos años de hablar con la voz de otras personas, de otros personajes quería empezar a hablar con mi propia voz. Había muchas cosas que yo quería decir y mientras no tuviera mi propio proyecto no iba a proyectar esa voz que era algo que yo estaba necesitando. Casa E es una locura, creo que hay que tener un poco de locura para lanzarse a esta idea titánica que requiere tanta pasión y entrega.

Me inspiró una mujer visionaria como Katrin Nyfeler, que es una gran estratega, una empresaria que creyó en mi idea de tener un lugar que se convirtiera en una plataforma para el teatro colombiano y ahí la escogencia de la programación fue clave. Al principio no comprendía el por qué de ese rigor, pero después me di cuenta de que era la forma de garantizar dos valores que nos representan la innovación y la calidad.

Tenemos una casa, una bella casa construida a finales de los años 50, una casa alegre con una arquitectura única. Este espacio no convencional nos obligaba a tener una propuesta distinta donde empezamos a caminar hacia el teatro contemporáneo y a invitar a los artistas a usar su creatividad al máximo. Los microteatros, la habitación 333, el teatro inmersivo, los cabarets, el Festival ni con el pétalo de una rosa,todo lo que hemos hecho con Casa E social por mencionar algunas experiencias, han convertido a Casa E en una plataforma para el teatro colombiano.

Momentos difíciles hemos tenido muchos, llegar a una Casa en un barrio que como su nombre lo indica estaba sumido en una profunda soledad. Asomarse a la baranda de la casa y ver las luces de las casas apagadas a las 8:00 p.m., me hacía pensar: ¡cómo me vine a meter en esto! La falta de recursos, la relación con los artistas que siempre es maravillosa, pero también puede llegar a ser compleja.

Hoy contamos con una sala como la Mayolo, nuestra primera sala donde presenté Pharmakon, una obra intensa, compleja, escrita por mi gran amigo Carlos Mayolo. La Sala Buenaventura, un homenaje al Maestro Enrique Buenaventura, pero también un espacio para la innovación. Nuestro salón central, donde nos atrevemos a jugar y seducir al público, el teatro Arlequín, un lugar mágico que estuvo a punto de ser demolido, lo recuperamos para la ciudad y hoy en día es un lugar donde presentamos grandes formatos. Seis salas de microteatro, una escuela de formación y un área que desarrolla proyectos sociales y con todo eso creo que somos todavía mucho más.

Arriesgarnos todos los días, esto es vivir en la cuerda floja y poca gente quiere vivir así. Yo siempre he estado en el borde y he aprovechado la sensación de vacío, soy arriesgada y la casa es un espacio cultural arriesgado eso es una cosa difícil para el equipo que cada vez se ha profesionalizado más, para los artistas que crean, que actúan, que producen cuando los invitamos a arriesgarse con nosotros.

Me siento orgullosa de tener Casa E, de haber presentado más de 25,000 funciones, estar cumpliendo 10 años, tener un público que quiere la casa. Pero lo que más me llena de orgullo es VICTUS nuestra más reciente producción. Un proyecto que por primera vez en la historia del arte colombiano reúne en la escena a excomatientes de las FARC, en ELN, las AUC y militares y policías heridos en combate. Nuestro aporte a la reconciliación y la pedagogía que usarmos. Este es el trabajo más serio de mi vida, a pesar de todo, de ser una familia disfuncional aquí estamos después y eso habla de lo que ha sido Victus. Aportar a la la memoria de este país que la gente quiere olvidar.

Sigo creyendo en Casa E porque nos vamos a reinventar. Lo que yo más soñaba es que la creatividad fuera parte del ADN de la Casa. Pensando en la calidad, en ser una plataforma para los nuevos creadores y también para aquellos de trayectoria. Lo que viene para Casa E es un gran desafío, tenemos una programación especial de aniversario, obras emblemáticas, teatro musical, experiencias de gran formato. Nos vamos a tomar esta Casa, que fue hecha para ser recorrida, donde se trabaja con amor y pasión por lo que hacemos realizando proyectos que espero se vuelvan emblemáticos.