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Boca de Serpiente decidió realizar un ejercicio de conciencia e introspección para el lanzamiento de su nuevo sencillo “Irreal”. La banda asegura que es el mismo que cualquier ser humano vive cuando ve su reflejo y se identifica con su propia forma, sus sentidos y aquellos placeres que lo rodean, con los que luego se convierte en esclavo de sus apegos.
“Irreal” fue producida, mezclada y masterizada en Bogotá por Godi Gaviria, quien se encargó de mantener los riffs y darles fuerza a los coros que transmiten potencia y agresividad, aspectos que se han convertido en el sello de Boca de Serpiente.
“Como seres humanos, nuestra naturaleza nos encamina a comportamientos obsesivos, regularmente. Esos momentos en los que nuestros apegos nos gobiernan son ideales para sintonizarse con la canción”, aseguran Juan Marín y Santiago Torrents, integrantes de Boca de Serpiente. (Le recomendamos: Sebastián Yatra estrena la canción “Adiós”).
El video oficial de “Irreal” fue idea original de Boca de Serpiente, Santiago (Batería) y Juan (Voz) fueron los encargados tanto de la dirección, como de la producción del clip, que, como todos los videos de la agrupación, presenta una historia con múltiples interpretaciones.
“En Irreal, un personaje en un día de su vida, comienza a recordar cómo sus obsesiones lo atan a lugares de los que no puede salir. En un ejercicio de conciencia logra darse cuenta de las realidades paralelas y las irrealidades que su mente crea por ello”, añade Boca de Serpiente.
El clip, que fue grabado en el municipio de Subachoque y en La Calera, bajo las medidas de bioseguridad, cuenta con la actuación de Juan Carlos Flórez y con la participación de Kilder Moreno, quien se encargó de realizar las tomas con drone entregándole al video diferentes perspectivas.
Nacida en la ciudad de Bogotá durante el año 2016, Boca de Serpiente expone el rock agresivo y desgarrador inspirado en los 90. (Le puede interesar: Alejandra Guzmán regresa a sus raíces y muestra su “Lado Oscuro”).
Juan Marín en la voz y el bajo, y Santiago Torrents en la batería; comandan el rito que invoca los sonidos que sonaban a finales de la década de los 90 con bandas como Pantera, Metallica y Rage Against The Machine, entre otros.