La voz de Eddie Vedder fue uno de los paradigmas de la música que dominó en los años noventa. Enérgica y sensible, su garganta interpretó versos que aún hoy suenan constantemente en las radios de todo el mundo. Bordeando los sesenta años de edad, él y sus compañeros de banda, Pearl Jam, tienen una madurez que se refleja en sus más recientes composiciones.
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“Dark Matter”, su nuevo disco de estudio, contiene once canciones capaces de conducir al oyente por un viaje emocional muy en la línea de la era dorada de sus primeros trabajos. En este punto a estos músicos ya se les puede categorizar como rock clásico. Los sencillos “Running” y “Wreckage” junto al que da título a la grabación develan a una banda reflexiva que no pierde la urgencia de sus raíces.
Tal sonido vigoroso cuenta con un reputado productor en su respaldo: Andrew Watt. Un hombre de apenas 33 años de edad, y que se ha convertido en pieza clave para la consecución de los más recientes álbumes de conjuntos y artistas aún más longevos que Pearl Jam. Tal es el caso de Ozzy Osbourne, Iggy Pop y los mismísimos The Rolling Stones, quienes no han dudado en contratar sus servicios. Watt nació el mismo mes que Pearl Jam ofrecía su primer show en la ciudad de Seattle por allá en octubre de 1990.
Watt también funge como compositor en todos los cortes. Las melodías suenan amplificadas, las guitarras están aceitadas, el bajo es robusto y la batería bien precisa. Quizá lo mejor de todo es contemplar cómo esa vocal de Vedder está indemne al paso del tiempo; es un cronista, un enamorado y un poeta como pocos de aquella generación de la música rebosante de distorsión.
Otro de los factores que hacen a “Dark Matter” tan recomendable es que tiene un enfoque más directo y menos elaborado en la estructura de las composiciones. Su antecesor, “Gigaton” (2020), era mucho más pensado, y su temática alrededor del cambio climático o la tensa situación política en Estados Unidos lo condujeron a perder el nervio y la espontaneidad característica.
La apertura con “Scared of Fear” dice con todos los bríos que Pearl Jam está en plena forma. “React, Respond” es un déjà vu de los días de su álbum “Vs.”. Por su parte, “Wreckage” es tan sentida cómo preciosa. “Something Special” es una joya tal y como lo advierte su título. La oscura “Upper Hand” muestra que ellos aún nos pueden sorprender y “Waiting for Steve” o “Got to Give” evidentemente podrán funcionar en sus próximos conciertos.
Hablando de conciertos, ya casi se cumple una década de la única visita del grupo a nuestro país. Ojalá esta “materia oscura” conlleve un reencuentro. Es sin duda el momento ideal.