LEO: Repasa su infancia y adolescencia llenas de color, sus primeras incursiones en el mundo adulto, cuando abría la puerta en busca de libertad y sus primeros amores, torpes, algunos prohibidos… Este repaso se nubla con la lista de las personas que ya no están y las situaciones felices que no puede repetir. Cierra, entonces, los ojos y pide que el tiempo no se acabe. Con los años que le quedan por vivir, como dice el bolero…
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