Con Daniel Álvarez Mikey, la dramaturgia tiene su torneo propio

Con el primer Torneo de Dramaturgia, que se realizará entre el 13 de junio y el 12 de julio en el Teatro Colón, se busca construir audiencias fieles y determinar el estado actual del medio teatral en Colombia.

El Espectador
09 de junio de 2018 - 02:00 a. m.
Para Daniel Álvarez Mikey, el principal legado de Fanny Mikey consiste en levantar tinglados de artes escénicas./ Cortesía
Para Daniel Álvarez Mikey, el principal legado de Fanny Mikey consiste en levantar tinglados de artes escénicas./ Cortesía
Foto: ANDRES GOMEZ S.

¿De dónde nació la idea de hacer un torneo de dramaturgia en Bogotá?

Es una idea de Manuel José Álvarez, director del Teatro Colón, quien se planteó qué está sucediendo con la dramaturgia en Colombia. Hay gente muy talentosa que no tiene la oportunidad de visibilizar su trabajo en las tablas. Él miró hacia España, en donde hacen un torneo muy similar en Girona, aunque nosotros lo adaptamos con algunas variaciones.

¿Cuáles son las principales variaciones respecto al torneo que se hace en Girona?

Al formato le dimos muchas vueltas para tratar de mejorarlo y a lo que llegamos fue a una competencia que está dividida en dos partes. La primera es una ronda clasificatoria y la otra una eliminación. En la primera se hace una convocatoria pública, abierta, para todos los directores y actores con habilidades para escribir para el teatro. Recibimos 83 propuestas y le pedimos a un jurado que escogiera ocho finalistas.

¿Qué pasa durante la eliminación?

Esa ronda es un juego, y es lo que arranca la próxima semana. No es una competencia de talento, es más bien una dinámica lúdica, pero que tuviera la confrontación de tener al público en vivo y que los textos seleccionados fueran representados por actores y no por los mismos dramaturgos. Es un ring de lucha libre y ahí se hace la exposición de los textos. La votación final se hace en tiempo real en el Teatro Colón, en Bogotá.

¿Cuánto dura el torneo?

El torneo tiene siete fechas. Son ocho equipos, es decir, entramos de una en los cuartos de final. Comenzamos el 13 de junio y finalizamos el 12 de julio.

Coincide con las fechas del Mundial de Fútbol. ¿Eso estaba previsto?

Claro que sí. Queremos aprovechar la coyuntura porque no a todo el mundo le gusta el fútbol, pero como los partidos son en la mañana, eso nos ayuda con la programación de las salas de teatro.

¿Por qué habrá lucha libre en los intermedios de este primer Torneo de Dramaturgia?

La lucha libre es muy teatral. Queríamos generar un espacio entre las lecturas de los textos dramáticos. La lucha libre tiene una puesta en escena, con personajes y una historia (villanos y héroes).

¿Con las propuestas recibidas en la primera fase del torneo se puede hacer un diagnóstico de cómo está la dramaturgia colombiana en la actualidad?

Creo que tendremos el panorama mucho más claro cuando conozcamos al ganador. Ahí nos daremos cuenta de qué predomina en el ambiente, si dramaturgos de trayectoria o personas emergentes en este ámbito.

Para usted, ¿cuál es el legado de Fanny Mikey?

El legado de Fanny Mikey no es el Festival Iberoamericano de Teatro, tampoco son las tres salas del Teatro Nacional. Su legado es hacer real su sueño de levantar tinglados de artes escénicas para que exista confrontación teatral. Yo veo su legado en compañías chicas que tienen el deseo de acaparar público.

¿Cuáles fueron los retos cuando se creó el Festival Iberoamericano en 1988 y cuáles son los retos hoy con este Torneo de Dramaturgia?

Ambos espacios se deben al público, y de lo que se trata es de la construcción de una audiencia que por lo menos entienda qué le gusta y qué no le gusta. Por lo general, la gente no valora lo que pasa en su casa hasta que se confronta con lo que viene del exterior. El reto en ambos es consolidar la credibilidad.

En general, parece que la gente en Colombia se acostumbró a que la cita con el teatro es nada más cada dos años con el Festival Iberoamericano y que entre un evento y otro no hay mucha oferta. ¿Esta visión es equivocada?

El festival en sus más recientes ediciones se ha acostumbrado a ser un evento de entretenimiento. Por eso trae grandes espectáculos y mucho teatro de vanguardia, así que cada vez hay menos teatro de texto. Creo que tenemos una cartelera teatral que a veces no presenta propuestas muy novedosas y la gran apuesta del Iberoamericano es llenar las salas con iniciativas de entretenimiento, porque se sabe que en el tiempo restante las ofertas son limitadas.

Por El Espectador

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar