Laura Tobón, la madrina en “La Voz Kids”

Laura Tobón participa por segunda vez consecutiva en “La Voz Kids”. /

¿Qué significa para usted ser parte de la cuarta temporada de “La Voz Kids”?

Es mi segunda oportunidad en este formato y para mí es un honor ser parte de La Voz Kids. Yo, como siempre, llego a ser el angelito, como el hada madrina, como la hermana mayor que acompaña a los niños para que no sientan temor, ni nervios. Mi función es darles energía y llenarlos de magia antes de enfrentar el diamante del programa. Esto para mí no es un trabajo, es una pasión. Me encanta hacer parte del proyecto y los días se me han pasado muy rápido.

¿Fue fácil seducirla para integrar de nuevo “La Voz Kids”?

No tuvieron que seducirme, la verdad. Tan pronto me convocaron, yo dije de una vez que hacía parte del programa. Luego me contaron que éramos los mismos integrantes de la vez pasada, lo que quiere decir que me iba a sentir, de nuevo, en familia. Tenemos muy buena química entre nosotros y eso, apoyado con la actitud de los niños, nos hace ser un formato maravilloso.

Su labor es acompañar a los niños en la antesala de su presentación ante los entrenadores, ¿Cómo los prepara y qué les dice?

A mí me gusta la diversión y me gusta reírme, entonces les hago terapias de risas todo el tiempo para que se sientan tranquilos con ellos mismos. Los niños reciben mucha presión por parte de los papás, así que me toca a mí llegar con humor y con historias para hacer que se abran y me cuenten algo más sobre ellos mismos. Lo más chévere de todo es que cada vez que hablo con ellos recibo una lección de vida.

¿También le toca levantarles el ánimo cuando los entrenadores no los aceptan en sus equipos?

Claro. Yo me encuentro con ellos después y saben que no pasaron, pero que este año los he visto mucho más maduros. Me parece que todos los niños saben que pisar el diamante es ya haber ganado mucho. Todavía no me ha tocado ningún niño haciendo drama por su salida del programa, todavía no.

¿Se ha visto reflejada en la historia de vida de alguna de estas niñas participantes?

Tuve una chica, que apareció en el primer capítulo de La Voz Kids, que en su interior sabe que puede dar mucho más, pero que le falta seguridad. Yo de niña era muy tímida y no confiaba en mi talento. Recuerdo que de niña tenía un diario en el que escribía las frases de empoderamiento y lo mismo le pasa a ella. Por eso tuvimos una química muy linda, así que lo que hice fue aconsejarla y decirle que se ame tal cual es ella.

¿Antes de ser parte de “La Voz Kids” veía el programa?

Siempre he visto el formato y veía a Alejandro presentando, veía a Linda Palma y a Fanny. Me parecía un programa maravilloso y sentía que toda Colombia lograba conectarse con él porque cautivaba corazones. Me parecía increíble poderlos acompañar y mírenme en dónde estoy ahora.

¿Le gusta verse en televisión?

Yo soy muy crítica conmigo misma, pero creo que así somos todas las mujeres porque somos muy observadoras. Me gusta mucho estudiarme para identificar en qué puedo mejorar, porque todos los días se puede aprender.

¿Cuál es el aporte que hace un formato como “La Voz Kids” a Colombia?

Este programa es un aire de felicidad y logra que a todos se nos olviden los problemas. Para los colombianos es una especie de refresco que nos permite sonreír un poquito más. Siento que en la actualidad uno quiere conectarse y ver algo amable en televisión, y qué puede ser más amable que unos niños queriendo ser artistas.

¿Cuál es el principal aprendizaje que ha tenido usted durante el proceso de producción de este formato?

La lección más importante que yo he recibido de La Voz Kids es que uno nunca puede rendirse. Lo más bonito es entender que los sueños se pueden lograr y que no existen los límites, ni siquiera el cielo es el límite. Todo eso me han enseñado los niños, incluso aquellos que no clasifican porque ellos tienen la fuerza para seguir adelante buscando su realización artística.

¿Y el reto más grande con el programa?

El reto más grande ha sido volver a ser una niña. Yo ya soy grande, soy una mujer casada, pero regresar a la infancia ha sido maravilloso. Con estos niños he recordado cómo me gustaba jugar.