“Se ha fortalecido la convicción del sí podemos”

El embajador de Suiza, Kurt Kunz, celebra hoy la fiesta nacional de su país. / Christian Garavito

¿Qué cambios ve en Colombia desde cuando llegó al país y ahora que termina su misión?

Han sido años muy intensos. Cuando llegué, el país estaba en plena negociación de los Acuerdos parciales y hoy se encuentra avanzando en la implementación del Acuerdo de paz. Hace cuatro años Colombia estaba negociando y ajustándose para entrar a la OCDE y ahora es miembro de esta organización. Veo un país con una sociedad civil más segura de ella misma y donde la violencia, la injusticia y la desigualdad son cada vez menos toleradas. En estos cuatro años se ha fortalecido la convicción del “sí, podemos” que reina en el país. Lo que sigue preocupando es la presencia de actores armados y las amenazas y asesinatos de líderes sociales, de personas que justamente quieren contribuir a la construcción de esta sociedad.

Cree que ahora que se firmó la paz, ¿Colombia puede ser un país más atractivo para la inversión extranjera?

Por cierto, lo es. Colombia ha dado noticias positivas; se ha notado con alivio que es a través de la negociación que se ha concluido un conflicto de décadas. Lo que ha pasado en Colombia nutre el interés y la atención que recibe el país. Lo que también convence es la estabilidad macroeconómica que se ha mantenido a pesar de fuertes tormentas en mercados externos. Lo que me ha impresionado particularmente es la tranquilidad con la que se han llevado adelante los últimos comicios.

¿En qué sectores se enfoca la presencia suiza en Colombia?

Las relaciones entre Suiza y Colombia son amplias y profundas. Las cuidamos con encuentros de muy alto nivel —el presidente suizo visitó Bogotá hace dos años— y las afianzamos con consultas políticas anuales. Los programas de cooperación nos llevan a diálogos políticos en sectores de interés común. Pero, la presencia de un país es, al final, siempre un asunto de seres humanos. Son 2.700 conciudadanos los que viven aquí, está el Colegio Helvetia, en Bogotá, y hay un gran número de pequeñas, medianas y grandes empresas suizas radicadas en Colombia, a menudo desde hace décadas. Para mí ha sido importante contribuir a fortalecer y crear nuevos lazos de confianza entre Suiza y Colombia.

Suiza mantiene un amplio programa de cooperación con el Gobierno colombiano. ¿Cuál es ese programa que usted considera se ha consolidado mejor?

Colombia es uno de los pocos países con presencia de los tres programas Ayuda Humanitaria y Desarrollo, Paz y Derechos Humanos y Cooperación Económica y Desarrollo. Esta presencia refleja los grandes retos que caracterizan a Colombia, retos en los que apoyamos al Gobierno y al país con el anhelo de contribuir a la paz y el desarrollo económico sostenible que cree oportunidades para todos. Los compromisos para el periodo 2017 a 2020 podrán elevarse a aproximadamente US$100 millones. Cada programa tiene un enfoque propio. Prestamos mucha atención a la pertinencia de los proyectos, que respondan a una necesidad, que la gente pueda aprender algo importante y que tal vez puedan ser replicados. El liderazgo siempre es de Colombia. Buscamos formas innovadoras de llevar a cabo los proyectos, por ejemplo, implicando cada vez más al sector privado.

Suiza anunció US$22 millones para el posconflicto, entre los que destacan el programa Colombia + Competitiva ¿Cómo ve el desarrollo de medianas y pequeñas empresas en Colombia?

Con Colombia + Competitiva queremos contribuir a la competitividad y la diversificación de la economía colombiana. A nivel regional esto se traduce en proyectos para fortalecer las cadenas de valor Cacaos Especiales, Construcción Sostenible, Cosmética Natural y Turismo Sostenible. Las pequeñas y medianas empresas son la espina dorsal del tejido económico del país. Es allí donde más empleo se crea y donde mucha innovación acontece. Hemos estado apoyando la gobernanza, es decir el régimen interno y la sostenibilidad de pymes. La formación de personal cualificado —pienso sobre todo en la formación técnica y profesional— es de una importancia capital para su prosperidad.

Parte de ese dinero, anunció el Gobierno suizo, lo invertirán en la construcción de confianza. ¿Cómo hacer eso en Colombia?

La confianza es ingrediente sine qua non de cualquier estructura social respetuosa con los derechos humanos. Marca las relaciones entre personas y entre las personas y las instituciones. El conflicto interno ha socavado esta confianza. Trabajamos para fortalecer esta confianza en nuestros proyectos. Para dar un ejemplo: en un proyecto que busca soluciones en agua y saneamiento implicamos a las personas en el diseño, para que después interactúen con las instituciones que ejecutarán las obras. La participación efectiva de las personas, de la sociedad civil, es clave para la confianza y la construcción de paz.

Como observador de la Alianza del tPacífico, ¿cómo ve esta asociación regional? ¿Considera que tiene más influencia internacional?

La Alianza es una plataforma con una intensa dinámica interna que acerca y tiende a integrar los mercados de los cuatro países miembros. La Alianza también abre ventanas hacia el mundo; en primer lugar, hacia el Pacífico, pero también hacia otros países. Suiza es un observador activo y ha realizado varios proyectos concretos con la Alianza, particularmente en las áreas de la formación técnica y profesional y de la innovación. Una propuesta en gestión corporativa del agua está en buen camino. El reciente Encuentro de Jóvenes de la Alianza del Pacífico, organizado por Nestlé y Colombia en Cali, estuvo marcado por el empoderamiento de los jóvenes para tomar la iniciativa y diseñar su futuro y el de sus países. Suiza ha sido co-sponsor del Encuentro y destaca la relevancia de la formación técnica profesional dual, que combina la formación técnica con el trabajo práctico en una empresa. Este sistema es altamente integrativo, estimula los talentos y reduce el desempleo juvenil.

¿Y cómo va la cooperación en cultura y ciencia?

El interés está más vivo que nunca, lo vemos en el número récord de estudiantes suizos que se matriculan en Colombia y en el interés de universidades suizas para concluir acuerdos de cooperación con pares en Colombia. Las propuestas de investigadores de Colombia para cooperar con investigadores suizos son de alta calidad y han sido campeones en la última licitación “Research Merger”. Suiza ofrece también becas para doctorado y posdoctorado en investigación. Hay más artistas o conjuntos artísticos que vienen a Colombia. Desde el año pasado, la fundación cultural Pro Helvetia promueve el programa Coincidencia, que fomenta intercambios culturales entre artistas suizos y suramericanos.

¿Cómo ha sido la cooperación de Suiza con Colombia en política de drogas?

Nos estamos coordinando a nivel multilateral y sobre todo en las Naciones Unidas. Somos voces de los países que abogan por una política internacional de drogas que se base en los derechos humanos y que trate el problema desde la perspectiva de salud pública y no solamente desde el punto de vista de seguridad. Suiza tenía enormes problemas de consumo de drogas en el espacio público hace 30 años y adoptó una serie de políticas que han dado buenos resultados. Hemos podido concretar una colaboración bilateral, compartiendo experiencias y experticia entre expertos.