Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
El kumis, al igual que el yogurt tiene bacterias que son beneficiosas para el organismo y la digestión, pues tiene un bajo aporte calórico, ideal para consumir en las meriendas de adultos y niños.
Un vaso de 150 ml de kumis aporta 25 % de calcio que mantiene huesos y dientes fuertes, además, del 12 % de proteína que ayuda a formar músculos.
Puedes leer: Receta de mojito: prepara este coctel para celebrar este fin de semana
Este es un producto fermentado y en la mayoría de los casos se elabora con leche de vaca. En Colombia, es una bebida muy popular que puede hacerse en casa o encontrarse en diversas tiendas como producto comercial.
Si quieres tener esta bebida en tu mesa, acá te enseñamos a prepararla con leche cortada desde la comodidad de tu hogar para que compartas con tu familia y amigos.

¿Cómo hacer kumis?
La sección de gastronomía de El Espectador ha explicado cómo llevar a cabo esta receta. A continuación, te reseñamos el paso a paso y los ingredientes que requieres.
Gastronomía: Colombiana.
Aprende a preparar esta receta desde casa.
- Tiempo de preparación: 2000 minutos.
- Tiempo de cocción: 240 minutos.
- Porciones: 4.
Ingredientes
- 1 litro de leche entera
- 4 ó 5 cucharadas de kumis
- 2 cucharadas de leche en polvo
- Endulzante a elección
Preparación de un kumis
Paso 1
Vierte todo el litro de leche en una cacerola y caliéntela a la temperatura deseada: esta vez a 70 °C. Cuando esté lista, toma un poco de leche y ponla en un pocillo para diluir dos cucharadas de leche en polvo.
Ahora pon esta mezcla en la leche en la estufa, revuelve, sube el fuego y deja que hierva a 90 °C.
Lee también: Cinco cócteles con mezcal que te encantarán
Paso 2
En este punto necesitamos realizar un choque térmico. Para ello, se hace un baño maría inverso con un bowl de agua con hielo, es decir, pones la olla con leche en un recipiente con hielo, remueves y dejas enfriar a 43°C.
Paso 3
Cuando llegue a la temperatura deseada, añade de 4 a 5 cucharadas de kumis y mezclas bien hasta que se incorpore por completo a la leche.
Paso 4
Busca un recipiente para la fermentación y cúbrelo. Trata de mantenerlo a una buena temperatura, por ejemplo, puedes envolver en una manta.
También, puedes poner el recipiente en la alfombra o en una bolsa bien sellada.
Paso 5
Después de 24 horas, retira el recipiente de donde lo tengas guardado. Ten en cuenta que la mezcla debe tener una consistencia cremosa.
Puedes deshacerte de los grumos poniendo todo el contenido en una licuadora y ahí mismo, añade un edulcorante: miel o stevia.
Puedes leer: Batido de espinaca y banano: una opción nutritiva para tu desayuno
Paso 6
Vierte el contenido en frascos. Cúbrelo con vinipel y ponlo en la nevera durante al menos 4 horas. Cuando lo saques de la nevera de nuevo, revuélvelo para que se combine completamente de nuevo.
¡Listo! Ya puedes servir y disfrutar.
