Un poco de historia del té matcha
El té matcha nació alrededor del siglo XII en Japón, donde se convirtió en una parte integral de la ceremonia del té en la cultura japonesa. Desarrollado por monjes budistas como una herramienta para la meditación, el matcha se cultivaba meticulosamente, protegiendo las hojas del sol durante semanas antes de la cosecha para aumentar su contenido de clorofila y aminoácidos.
Las hojas se secaban, se molían a mano en piedras de molino hasta obtener un polvo fino y se mezclaban con agua caliente durante un ritual. Esta práctica, conocida como “chanoyu” o “sado”, no solo celebraba la estética y la gracia, sino que también enfatizaba la conexión espiritual con la naturaleza y el momento presente, convirtiendo al matcha en una parte esencial de la vida cotidiana y la filosofía japonesa.
Hoy en día, el té matcha ha ganado popularidad en todo el mundo por sus beneficios para la salud. Al ser una fuente concentrada de antioxidantes, vitaminas y minerales, el matcha puede ayudar a mejorar la concentración, aumentar la energía de manera sostenida y fortalecer el sistema inmunológico. Además, al contener menos cafeína que el café y ofrecer una liberación gradual de energía, el matcha es considerado una alternativa más saludable para quienes buscan un impulso de energía sin los efectos negativos asociados con el café.
Gastronomía: Latinoamericana .
Puedes sustituir la estevia por miel de abejas
- Tiempo de preparación: 5 minutos.
- Tiempo de cocción: 5 minutos.
- Porciones: 2.
Ingredientes
- 1/3 taza de crema de coco enlatada (elige una marca suave o sustituye por otra leche sin lácteos)
- 3/4 taza de agua (sustituye por más leche sin lácteos si no usas leche de coco enlatada)
- 1/4 cucharadita de cúrcuma en polvo
- 1/8 cucharadita de canela en polvo
- 1/8 cucharadita de jengibre en polvo
- 1 pizca de pimienta negra en polvo
- 1 pizca de cardamomo molido (opcional)
- ½ cucharadita de estevia
Preparación
Añade todos los ingredientes excepto el polvo de matcha, a una olla pequeña y calienta a fuego bajo. Mezcla frecuentemente, hasta que esté suave y caliente.
Bate el matcha (con un batidor de bambú si lo tienes, si no con un batidor tradicional pequeño) con 1 cucharada (15 mililitros) de agua caliente en un pequeño recipiente o taza.
Vierte el té matcha en la olla y mezcla de nuevo para combinar.
Montaje
Disfruta inmediatamente. Revuelve nuevamente si las especias comienzan a asentarse en el fondo del pocillo.
¡Trucos de la abuela!
Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) o al de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧