Ingredientes:
(6 porciones)
- 6 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cebolla cabezona blanca mediana
- 3 papas, medianas, peladas, sabaneras
- 1/4 taza de pimentón verde cortado en cubos pequeños
- 1 taza de pollo desmechado cocinado
- 4 champiñones tajados en lonjas
- 1/3 taza de tomate sin piel ni semillas cortado en cubos pequeños
- 1 1/2 cucharada de perejil crespo finamente picado
- 10 huevos grandes batidos
- Sal y pimienta recién molida
Preparación:
1. Parte la cebolla por la mitad. Corta cada mitad en medialunas. Debes obtener dos tazas.
2. Corta las papas por la mitad. Taja cada mitad en medialunas. Pon la papa tajada en agua fría por una hora. Cuela y escurre.
3. En un sartén antiadherente calienta el aceite. Agrega la cebolla, pimentón y la papa. Fríe a fuego medio hasta que la papa esté tierna.
4. Incorpora el pollo desmechado, tomate y perejil. Agrega los huevos, sal y pimienta. Continúa cocinando a fuego bajo. Con una espátula pequeña remueve los bordes de la tortilla para que no se pegue. Tapa el sartén y cuando esté firme dale la vuelta a la tortilla. Prosigue cocinando por cuatro minutos más. Desmolda en un plato y sirve acompañado con una ensalada verde.
La papa
Este tubérculo de la región andina ha sido uno de los aportes más importantes a la gastronomía mundial. Desde el siglo XVI fue llevada a Europa por los conquistadores. Existen diversas variedades que se diferencian por su tamaño, color y uso. Entre las más comunes encontramos la sabanera, o tocarreña, ideal para cocinar y freír; la pastusa, para hacer puré, y la criolla, deliciosa para freír. Están presentes en diversos platos típicos andinos y en nuestro país es un producto básico de la canasta familiar. Sin duda alguna su preparación cumbre está en el ajiaco, pero se consume en infi nitas formas. Se adapta a cualquier tipo de técnica culinaria, siempre obteniendo un resultado exquisito. Contiene vitaminas A, B y C.