Atentado sacude a Neiva

Un carro bomba explotó en un centro comercial y dejó 214 locales afectados. No hubo víctimas humanas. El presidente Álvaro Uribe visitó la zona y ofreció una recompensa de $50 millones para dar con los responsables.

Francisco Argüello / Especial para El Espectador
16 de enero de 2009 - 11:00 p. m.

Una explosión de gran poder despertó a los neivanos este viernes en la madrugada, cuando una carga explosiva estalló a las 2:00 a.m. en el parqueadero del centro comercial Los Comuneros, en pleno centro de Neiva, Huila.

Un carro que había sido dejado abandonado desde el día anterior en el cuarto piso del complejo comercial y que contenía 50 kilos de anfo, fue utilizado para el atentado, que dejó como saldo 214 locales totalmente averiados, según el censo adelantado por la Dirección de Emergencias municipal.

El frente del parqueadero del centro comercial quedó destruido y las ventanas de los negocios y viviendas aledañas al sector quedaron con los vidrios rotos.

“Fue horrible, sentía que el mundo se me venía encima. Estábamos dormidos cuando escuchamos el totazo. De inmediato salimos y nos dimos cuenta de que era en Los Comuneros”, dijo Adelaida Figueredo, una habitante del barrio Los Mártires, aledaño al sitio de los hechos.

Los bomberos de Neiva llegaron al lugar tras ser avisados telefónicamente. “Encontramos el carro bomba prendido en llamas. La explosión generó que un piso hacia abajo se destruyera parcialmente”, contó el capitán Leonidas Silva, comandante del Cuerpo de Bomberos.

Según estableció El Espectador, el carro bomba era un Mazda 323, color gris, modelo 85 y de placas ARB 584 de Neiva. La Secretaría de Tránsito municipal trata de identificar al propietario del automóvil por medio de la matrícula.


“El cuarto piso fue el más afectado. La estructura registró varios percances, hay  vidrios rotos y las divisiones tuvieron serias consecuencias. La mayoría de equipos de oficina se perdieron”, reportó Marleny Quesada, administradora del lugar, quien anunció la apertura del primer y segundo pisos en las próximas horas.

El comandante de la Policía del Huila, coronel Flavio Heriberto Mesa, informó que el carro bomba fue activado a control remoto y que la responsabilidad directa recae en las Farc, que quieren generar pánico.

Algunos propietarios de los locales afectados se lamentaban de lo sucedido y culpaban a las autoridades por la falta de precaución. “Ya estábamos advertidos, nos cayó la sal. Ahora no sabemos cuándo volveremos a abrir nuestros negocios”, dijo Rosenet Cabrera, comerciante de la zona.

 El presidente Álvaro Uribe llegó hasta Neiva, visitó el lugar y prometió una ayuda de dos salarios mínimos mensuales para los afectados. “Con el Banco de Desarrollo Empresarial y Comercio Exterior de Colombia, buscaremos microcréditos y así saldremos de este percance”. De igual forma, ofreció $50 millones de recompensa para las personas que ayuden a dar con el paradero de los responsables, al tiempo que reprochó el hecho.

“El país no puede permitir que estos bandidos nos engañen y que ahora venga el discurso político a hacerle eco a la hipocresía, a la capacidad de farsantes de estos bandidos que les hablan a las revistas internacionales de derechos humanos (...) y lo que hacen es asesinar campesinos y producir actos terroristas como éste”, subrayó el mandatario refiriéndose a las Farc.

Por Francisco Argüello / Especial para El Espectador

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