Su trazo no es delicado. Todo lo contrario, Chócolo tiene bien definida su línea, así como su forma de hacer humor. Por eso se ha ganado un lugar especial dentro del complejo ámbito de los caricaturistas colombianos.
Él, con fluidez, valentía y mucha conciencia social, mezcla el arte del dibujo, la inmediatez de la comunicación y la personalidad de la opinión, en una sola actividad: su caricatura.
Chócolo se encarga, todos los martes y viernes desde las páginas editoriales de El Espectador, de ratificar el viejo dicho de que “una imagen vale más que mil palabras”. Con pocas líneas, un espacio discreto y mucha creatividad, expresa conceptos, ideas, pensamientos y, por supuesto, sentimientos.
“Esta curiosa mezcla de artista, periodista, intelectual y humorista, a pesar de que no sea del todo reconocido, ha tenido un lugar relevante en Colombia”, comenta Santiago Rueda Fajardo, curador de la exposición denominada ‘La pasión de Chócolo’, en la que se hace evidente el carácter irreverente del caricaturista.
Su estilo no tiene igual, pues su propuesta arrasa con cualquier parámetro establecido sobre la estética. Lo mismo sucede con las opiniones que transmite, inclinándose por el humor contundente y sin vacilaciones.
La violencia urbana, los desplazamientos forzosos, la vida conyugal y la actualidad política toman parte de esta interesante exposición en la que Chócolo desnuda su pluma.
‘La pasión de Chócolo’. Sala de Exposiciones ASAB. Carrera 13 N° 14-69. Tel: 243 85 54. Desde el 2 de abril hasta el 2 de mayo.