Compañía Ilimitada dejó de mirarse en retrospectiva. Con más de 25 años de trabajo continuo en la música, esta banda bogotana integrada por Juancho Pulido y Piyo Jaramillo, evaluó su pasado pero tan sólo para tomarlo como punto de partida para afrontar el presente y proyectarse hacia el futuro.
El año del fuego, Tricyclo (1985), su primer trabajo discográfico, Contacto (1988) con su rotundo éxito, y su participación en el emblemático “Concierto de conciertos” (1988), son apenas tres de los miles de momentos memorables que tiene en su trayectoria esta agrupación cuya primera intención fue hacer que los jóvenes colombianos escucharan rock en su idioma.
“La puerta para que la gente acostumbrara el oído al español la abrimos de par en par. La segunda pelea era lograr ser internacionales y trabajar como en una comunidad artística y esa no la alcanzamos y nos quedamos en la frontera. Nosotros llevamos la bandera hasta ese lugar para que otros la tomaran”, manifiestan Juancho y Piyo, los integrantes de este grupo representante por excelencia del rock y el pop de Bogotá.
La capacidad creativa y el conocimiento del oficio son un bien adquirido para Compañía Ilimitada. Sin embargo, las expectativas se quedaron cortas y sus dos cabezas se centraron en la búsqueda de una ruta para internacionalizar su sonido. Ese sendero quedó incompleto y hoy están dispuestos a retomar el camino para llegar hasta la meta.
“Aquí, entre los grupos nacionales, nadie existe porque las bandas jóvenes que tienen éxito se separan a los pocos años. Es que ser una agrupación tiene mucho más de largo y profundo que va más allá de ganarse un premio”, aseguran con total conocimiento de causa.
Hace poco esta dupla creativa lanzó el disco Contacto, una especie de conmemoración remasterizada por tratarse de un álbum que se convirtió en un ícono de la música en Colombia. La edición de lujo de este trabajo viene con un libro de colección con fotografías inéditas de su participación en el denominado “Concierto de conciertos” y un DVD de más de dos horas de contenido con videoclips de apariciones en televisión y fragmentos desconocidos de algunas de las más importantes presentaciones, en vivo y en directo, de Compañía Ilimitada.
“Con este trabajo ratificamos que no somos una banda ligth; que hayan pegado en la radio las canciones más sencillas no es nuestra responsabilidad. Pero si nos escuchan con atención, se pueden dar cuenta de que tenemos mucho más de fondo que de superficie”, concluyen Juancho y Piyo, para quienes mirar hacia atrás ahora es un simple ejercicio.