Varese, Italia, tierra bendita para el ciclismo colombiano. Hace 37 años, el 22 de agosto de 1971, el antioqueño Martín Emilio Cochise Rodríguez ganó en el velódromo de esa ciudad el primer título mundial para nuestro país, en la persecución individual. Y el viernes, el cundinamarqués Fabio Andrés Duarte también se puso la camiseta arco iris que lo distingue como el mejor del planeta en la prueba de ruta, categoría sub 23.
El colombiano, nacido en Facatativá el 11 de junio de 1986, logró meterse en una fuga con siete corredores más, en la primera de las 10 vueltas que conformaban el recorrido de 173 kilómetros.
“Me sentía bien, fuerte y optimista, pero en ese momento no pensaba en ganar, sino en hacer una buena carrera y pelear por una medalla”, le relató Duarte a El Espectador minutos después de su hazaña. “Cuando faltaban dos vueltas y teníamos una buena diferencia, los fugados entendimos que entre nosotros estaba el ganador y comenzamos a cuidarnos. Yo ya había analizado el trayecto y sabía que tenía que atacar de lejos”, comentó.
Y con la voz aún entrecortada explicó con pelos y señales cómo consiguió el triunfo más importante de su corta pero exitosa carrera: “A 600 metros de la meta había un fuerte repecho y creí que era el mejor sitio para despegar. Lo hice y mis compañeros de fuga dudaron un poco, entonces pensé que esa era mi gran oportunidad. Le di con todo y sin arriesgar en las curvas hasta que llegué a la recta final, como de 100 metros, miré de reojo y vi que tenía una buena ventaja, crucé la línea, levanté los brazos y como buen colombiano grité ‘campeón h...’”.
Después todo fue celebración. A los primeros que abrazó fue a los miembros de la delegación nacional, encabezados por el técnico Oliverio Cárdenas y el delegado de la Fedeciclismo, Carlos Alberto Lenis.
Minutos después saludó a sus compañeros de aventura, Jarlinson Pantano y Jaime Suaza, quienes finalizaron en los puestos 81 y 97, respectivamente.
Duarte fue escoltado en la meta por el italiano Simone Ponzi, quien se colgó la medalla de plata, y al alemán John Degenkolb, ganador del bronce. “Ellos estaban muy confiados y creían que todo se iba a definir en los últimos 100 metros, pero los sorprendí de lejos y gracias a Dios tuve fuerzas para aguantar”, admitió el colombiano, quien les dedicó la victoria a sus familiares, a los compañeros, a los miembros del cuerpo técnico, a sus amigos Guillermo y Alfredo Cardozo, a Jaime Murra y “a todos los colombianos que están enfermos, secuestrados, sufriendo o pasando dificultades”.
El quinto título mundial
El nombre de Fabio Duarte estará desde ahora al lado de los de Martín Cochise Rodríguez (persecución individual 1971), Marlon Pérez (prueba por puntos juvenil en 1994), Santiago Botero (contrarreloj élite 2002) y María Luisa Calle (Scratch 2005), quienes también se consagraron campeones del mundo.
“Con todos he hablado y de una u otra forma en ellos me fijé para tratar de seguir sus pasos. Espero que sientan este triunfo como propio y tan orgullosos como yo de ellos”, señaló el corredor, que se formó en la Liga de Cundinamarca y antes de llegar a su actual equipo, el Colombia es Pasión, estuvo en UNE y Selle Italia.