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Jerau quiere ir a Viña

En el mítico festival de la canción, que se celebra en Chile, su prima Carolina Sabino ganó dos Gaviotas.

El Espectador
17 de junio de 2009 - 10:33 p. m.

Jerau, de Cartagena, es un artista heroico.

Totalmente heroico, tengo la sangre cartagenera y la siento.

¿A quién deja entrar a su corralito de piedra?

A todo el que quiera pasarla bien.

¿Cómo es su música?

De corazón.

¿El tropipop es una moda?

Es un nombre que le dieron a un género de música que se disparó hace cuatro años en las rumbas colombianas y en la radio.

¿Se considera representante de ese género?

Me han catalogado y no me molesta, por el contrario, me alegra que la gente rumbee con mi música. Yo le llamo pop latino.

¿Qué diferencia hay entre un costeño y un corroncho?

Corronchos hay en todas partes, costeños solamente los que estamos cerca al mar.

¿A quién están dirigidas sus canciones?

Al amor, están llenas de vivencias, amigos, desamores, decepciones, lloraderas e ilusiones.

¿Quién es su mayor influencia?

Mi mamá, Margarita.

Lo que más duro le dio cuando llegó a Bogotá.

No poder sentir y respirar la playa cerca.

¿A qué edad descubrió su pasión por la música?

Desde que estaba muy pequeñito, cantaba vallenatos de Diomedes, del Binomio de Oro.

¿Cuál fue la primera canción que escribió?

Buscar otro amor, a los 12 años.

¿En dónde dejó la administración de empresas?

La sigo llevando a donde voy, porque me gusta administrar mi vida, y mi sueño siempre fue estudiar eso para poder crear mi propia empresa.

¿En cuál festival de música le gustaría estar?

En Viña del mar, que allá ganó mi prima, Carolina Sabino, dos Gaviotas, ahí tenemos en la familia ese orgullo.

¿Componer o interpretar?

La composición es una magia diferente a cantar, pienso que cuando las dos se mezclan, como en mi caso, se llega al éxtasis.

¿Por qué Jerau?

Mi nombre artístico era Jerry Rodríguez, pero era un nombre muy repetitivo, sobre todo en Cartagena, y Jerau nos gustó, son las iniciales de Jerry con Augusto que es mi segundo nombre.

¿Cómo le fue con su primer sencillo ‘Estás conmigo’?

Fue una canción éxito nacional, incluso la canción estuvo nominada entre las diez mejores del año pasado.

¿Es tan aficionado al fútbol como dicen?

Sí, totalmente. Soy hincha del Júnior de Barranquilla, a pesar de que soy cartagenero, pero cuando estaba pequeño me llevaban al estadio de Barranquilla porque el Real Cartagena no existía aún.

¿Y a las mujeres?

También, obviamente son mis musas.

¿Cuál fue su primera conquista?

Yo estaba en preparatoria y tenía una novia, yo tenía cinco años. Yo me veía una novela que se llamaba La Fiera y me acuerdo que en los recreos jugábamos a La Fiera y yo era el actor principal; ella era la actriz y nos dábamos picos, se llamaba Magda.

¿Cómo se conquista a Jerau?

A mí me gusta mucho la mujer alegre, sencilla y conversadora.

¿Qué lo hace sonreír?

Los niños, me encantan, tengo  química bien chévere con ellos.

¿Sería un buen padre?


Yo creo que mi mamá me enseñó muchas cosas para ser un buen papá. Quiero tener una familia grande con cuatro o cinco hijos, si mi mujer quiere. Por ahí en tres o cuatro años.

Un defecto.

Soy muy acelerado, me gustan las cosas para ya, soy ardido, no rencoroso, pero muy explosivo en el momento.

¿Qué colecciona?

Gorras, tenía todas las gorras de los equipos de béisbol de las grandes ligas, pero se me han perdido algunas.

Una habilidad oculta.

Me apasiona mucho la geografía y la cultura general, me encanta saber cosas curiosas.

¿Ha dado alguna vez una serenata?

Sí, y ese es el peor recuerdo de mi vida, resulta que he hecho dos serenatas y en las dos la niña no estaba y fue a la que le compuse Estás conmigo.

El mejor cantante colombiano.

Hay muchos, como Andrés Cepeda, Adriana Botina, Shakira, Carlos Vives, Juanes...

La canción que más le gusta.

El ahijado, de Diomedes Díaz, y  La gota fría.

¿Y la que lo enrumba?

Todas las canciones de Soda Stereo me transforman.

Al lado de quién le gustaría cantar.

Juan Luis Guerra, porque pienso que es el papá de todo lo que está pasando en Latinoamérica con la música y sus letras.

Un sueño.

Tener mi familia y seguir alegrando a la gente con mi música.

Un aroma.

El mar.

Lo que más le admiran las mujeres.

Los ojos.

¿Le cambiaría algo a su físico?

De pronto los pies.

Una maña.

Hago muchos gestos con la cara.

¿Qué le gustaría aprender?

Tocar guitarra, tocar piano, me gustaría aprender cosas que me hagan ser más profesional en mi carrera.

Su bebida favorita.

La Kola Román.

Su plato fuerte.

Me gustan mucho los mariscos. Soy buena muela.

Por El Espectador

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