Vargas Lleras expresó su malestar porque después de la reunión que sostuvo con Pardo el pasado jueves en el hotel Casa Medida, de Bogotá, “acordaron avanzar en una consulta interpartidista”, los liberales iniciaron contactos con el candidato del Polo Democrático, Gustavo Petro, con el mismo propósito de buscar una alianza, ante lo cual indicó que “queda superado ese capítulo” y descartó otro encuentro con Pardo.
Al conocer la decisión, el aspirante liberal respondió que “tenemos diferencias y coincidencias con el Polo Democrático , quizá más coincidencias con Cambio Radical, pero a los liberales nadie nos va a decir con quién hablar y con quién no”. El senador Juan Fernando Cristo, jefe de campaña de Pardo, dijo que Vargas Lleras “se asustó con las últimas encuestas. Se mamó de la consulta”, y le recomendó tranquilidad porque “está muy agresivo”.
Petro cuestionó que Vargas Lleras vea con malos ojos los mensajes de diálogo enviados por Pardo. “Cuando se excluye a alguien por su nombre, por su extracción social, política o ideológica, eso se llama sectarismo”.
Y en respuesta a sus dos adversarios, el jefe de Cambio Radical precisó que no les está dando órdenes a los liberales y por eso despeja el camino, al tiempo que aclaró que no saca a Petro, pero descartó un acuerdo con el Polo por falta de afinidad política.
En conclusión, a tres meses de la elección presidencial la coalición uribista disfrutará a plenitud las festividades de fin de año, porque el escenario que queda planteado con lo sucedido en las últimas horas le despeja el camino en las urnas.