D6, la estrategia de guerra contra las bandas criminales
El Ministerio de Defensa diseñó una propuesta que serviría como soporte de la estrategia gubernamental para atacar estructuralmente a estos grupos delincuenciales.
El Espectador
Elespectador.com conoció la propuesta elaborada por el Ministerio de Defensa sobre la estrategia de guerra que considera eficaz para acabar estructuralmente con las bandas criminales a lo largo del territorio nacional.
El documento de más de 20 hojas refleja los resultados de una serie de reuniones y cruces de información de inteligencia de las diferentes fuerzas que les permiten establecer –gracias al trabajo de campo de los últimos meses- la ubicación, cabecillas, rutas de movilidad y ejes de influencia de las denominadas Bacrim o bandas criminales.
El D6 comprende seis líneas de acción enfocadas en desarticular, desmantelar, denegar, disuadir, direccionar y difundir; y cada una estará apoyada en una estrategia operativa diferente que permita acabar con estas organizaciones y reductos que surjan con el tiempo.
La propuesta plantea la creación de Fuerzas de Tarea Conjunta contra las Bacrim, unidades especiales con puesto de mando en zonas específicas y unidades operativas que tendría la misión de apoyar las operaciones ofensivas sobre las áreas y corredores estratégicos de movilidad.
Estas unidades estarían conformadas por hombres de todas las fuerzas, con experiencia en reconocimiento, francotiradores, armas de acompañamiento, explosivos y demoliciones.
Las Fuerzas de Tarea Conjunta funcionarían igual a las que se crearon en el marco de la lucha contra las Farc y que han permitido la consolidación de los antiguos santuarios de la guerrilla.
Adicionalmente, se reforzará el trabajo de inteligencia para evitar que las bandas criminales intervengan en los procesos electorales y se creará un plan específico de contrainteligencia para detectar y evitar que los delincuentes se filtren en las filas de la Fuerza Pública.
La propuesta diseñada por el Ministerio de Defensa, se evalúa como soporte de la estrategia gubernamental para derrotar el accionar de estas organizaciones que en su mayoría están integradas por desmovilizados de los paramilitares, y que según el Gobierno hacen presencia en al menos 16 de los 32 departamentos del país.
Fuentes consultadas señalaron que esta nueva “cruzada contra la delincuencia y el crimen” obedece a la orden perentoria del presidente Santos de “no quedarse quietos y actuar con contundencia ante la arremetida de las bandas criminales”.
Elespectador.com conoció la propuesta elaborada por el Ministerio de Defensa sobre la estrategia de guerra que considera eficaz para acabar estructuralmente con las bandas criminales a lo largo del territorio nacional.
El documento de más de 20 hojas refleja los resultados de una serie de reuniones y cruces de información de inteligencia de las diferentes fuerzas que les permiten establecer –gracias al trabajo de campo de los últimos meses- la ubicación, cabecillas, rutas de movilidad y ejes de influencia de las denominadas Bacrim o bandas criminales.
El D6 comprende seis líneas de acción enfocadas en desarticular, desmantelar, denegar, disuadir, direccionar y difundir; y cada una estará apoyada en una estrategia operativa diferente que permita acabar con estas organizaciones y reductos que surjan con el tiempo.
La propuesta plantea la creación de Fuerzas de Tarea Conjunta contra las Bacrim, unidades especiales con puesto de mando en zonas específicas y unidades operativas que tendría la misión de apoyar las operaciones ofensivas sobre las áreas y corredores estratégicos de movilidad.
Estas unidades estarían conformadas por hombres de todas las fuerzas, con experiencia en reconocimiento, francotiradores, armas de acompañamiento, explosivos y demoliciones.
Las Fuerzas de Tarea Conjunta funcionarían igual a las que se crearon en el marco de la lucha contra las Farc y que han permitido la consolidación de los antiguos santuarios de la guerrilla.
Adicionalmente, se reforzará el trabajo de inteligencia para evitar que las bandas criminales intervengan en los procesos electorales y se creará un plan específico de contrainteligencia para detectar y evitar que los delincuentes se filtren en las filas de la Fuerza Pública.
La propuesta diseñada por el Ministerio de Defensa, se evalúa como soporte de la estrategia gubernamental para derrotar el accionar de estas organizaciones que en su mayoría están integradas por desmovilizados de los paramilitares, y que según el Gobierno hacen presencia en al menos 16 de los 32 departamentos del país.
Fuentes consultadas señalaron que esta nueva “cruzada contra la delincuencia y el crimen” obedece a la orden perentoria del presidente Santos de “no quedarse quietos y actuar con contundencia ante la arremetida de las bandas criminales”.