Ke$ha tuvo una 'original idea' que transmitió a sus seguidores: quería un diente de cada uno de ellos para hacerse un brasier, un tocado y unos pendientes. Y lo consiguió. Con los 1.000 que recibió preparó sus diseños.
"Les pedí que me enviaran sus dientes, y recibí más de 1.000 dientes humanos. Los convertí en un brasier, en una diadema, en un collar y en unos pendientes. ¡Ya me los he puesto!", contó en exclusiva a la agencia BANG Showbiz.
Ke$ha disfruta interactuando con sus seguidores y cuando se siente triste organiza un encuentro con alguno para recordar por qué se dedica a la música
"¡Los quiero! Los llamo mi familia, mis animales. Todo este álbum es para ellos. El libro es para ellos. El título de mi segundo disco, 'Warrior' (Guerrero), fue inspirado por las historias que contaban. Cada vez que me siento... ya sabes... que no he dormido en tres días y estoy agotada, quedo con alguno de mis admiradores, y entonces me doy cuenta de que todo merece la pena por ellos. Es todo por ellos. Muchas personas han dicho que mi música les ayuda a superar cosas. Cosas como el acoso en internet o una ruptura. Y me encanta escuchar eso. Siento que todo merece la pena", añadió.