Catar 2022: estas son cinco especies nativas amenazadas de Senegal
Con el inicio de la Copa Mundial de Fútbol de Qatar 2022, desde la Red Zoocial exploramos la biodiversidad de las naciones participantes. En Senegal, de acuerdo con estudios oficiales, la mayoría de los ecosistemas se encuentran en estado de degradación.
La celebración de la Copa Mundial de Fútbol de Qatar 2022 no está separada de la conservación natural. Así lo demostró la designación de Fuleco, una especie de armadillo que puede enrollarse en una bola, y que fue nombrado como mascota oficial del Mundial en Brasil para destacar el riesgo de su extinción.
De esta manera, en la Red Zoocial le contamos sobre cinco especies que muestran la riqueza endémica de los países participantes en este certamen deportivo. En este caso trataremos el caso de Senegal, uno de los representantes del continente africano.
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Con sus extensas sabanas, estepas, bosques, humedales y sus más de 700 kilómetros de costa marítima, Senegal tiene una gran variedad de ecosistemas en el que viven cientos de especies nativas de esta nación africana, aunque no siempre sin riesgo.
“Según los conocimientos actuales, se sabe que la mayoría de los ecosistemas de Senegal se enfrentan a la degradación. Esta tendencia es especialmente ilustrativa en lo que respecta a los ecosistemas forestales del país, donde entre 2005 y 2010 se perdieron 40.000 hectáreas de bosque al año”, indica un informe del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Senegal.
De esta manera, la degradación del hábitat supone una amenaza grave para la supervivencia de varias especies nativas, entre las que se encuentran:
Gálago menor
Este primate es gregario, nocturno, y que vive principalmente en árboles en comunidades pequeñas. En promedio, llegan a medir entre 13 y 20 centímetros, y pesan entre 112 y 300 gramos.
Como lo indica el nombre de esta especie (galago senegalensis), estos individuos provienen principalmente en el sur de Sahara, en particular en el oeste de Senegal. En ese sentido, en los ecosistemas de estas zonas este mono cumple labores ecológicas, tal como la dispersión semillas para su polinización.
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Antílope derbiano
Al medir en promedio entre 2,20 y 2,90 metros, este es uno de los miembros de su especie más grandes del mundo. A pesar de su gran tamaño, son animales sociables y puede escapar a con facilidad a depredadores, como leones, entre otros.
Frente a su conservación, se estima que su población gira en torno a los 14 mil, por lo que actualmente esta especie se encuentra en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).
Mangabey gris
Los miembros de esta especie suelen vivir en comunidades entre los 70 y 120 individuos, en un sistema jerárquico línea. En ese sentido, las hembras, con una posición más elevada en el grupo, gastan menos tiempos en labores de forrajeo que otros miembros con posiciones inferiores.
Por su parte, estos monos viven principalmente en bosques secundarios, así como en manglares o en pantanos del noreste del continente africano. En ese sentido, esta especie se encuentra catalogada como vulnerable por la IUCN.
Potamoquero rojo
Este jabalí salvaje africano hace parte de la familia de los cerdos salvajes que habitan en África. Estos se caracterizan por su pelaje rojo y marcas blancas en torno a sus ojos, sus pómulos y sus mandíbulas.
Estos individuos son principalmente nocturnos, y pasan la mayoría de su tiempo en búsqueda de comida que hace parte de su dieta omnívora. De esta manera, algunos estudios indican que siguen a grupos de chimpancés en búsqueda frutas caídas. Aunque no se tiene un número estimado de su población, la IUCN estima que el principal riesgo para su conservación es la caza humana y la perdida de hábitat.
Delfín giboso atlántico
Los individuos de esta especie habitan en la costa atlántica de África, destacándose de por su giba protuberante en su aleta dorsal y por no ser delfines migratorios. En ese sentido, estos delfines miden en promedio dos metros y pesan entre 100 y 139 kilogramos.
Esta especie marina se encuentra actualmente catalogada con un riesgo grave de extinción. De esta manera, aunque las causas no son claras, se estima que la contaminación del mar y la sobrepesca ha incidido en el descenso de esta población.
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La celebración de la Copa Mundial de Fútbol de Qatar 2022 no está separada de la conservación natural. Así lo demostró la designación de Fuleco, una especie de armadillo que puede enrollarse en una bola, y que fue nombrado como mascota oficial del Mundial en Brasil para destacar el riesgo de su extinción.
De esta manera, en la Red Zoocial le contamos sobre cinco especies que muestran la riqueza endémica de los países participantes en este certamen deportivo. En este caso trataremos el caso de Senegal, uno de los representantes del continente africano.
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Con sus extensas sabanas, estepas, bosques, humedales y sus más de 700 kilómetros de costa marítima, Senegal tiene una gran variedad de ecosistemas en el que viven cientos de especies nativas de esta nación africana, aunque no siempre sin riesgo.
“Según los conocimientos actuales, se sabe que la mayoría de los ecosistemas de Senegal se enfrentan a la degradación. Esta tendencia es especialmente ilustrativa en lo que respecta a los ecosistemas forestales del país, donde entre 2005 y 2010 se perdieron 40.000 hectáreas de bosque al año”, indica un informe del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Senegal.
De esta manera, la degradación del hábitat supone una amenaza grave para la supervivencia de varias especies nativas, entre las que se encuentran:
Gálago menor
Este primate es gregario, nocturno, y que vive principalmente en árboles en comunidades pequeñas. En promedio, llegan a medir entre 13 y 20 centímetros, y pesan entre 112 y 300 gramos.
Como lo indica el nombre de esta especie (galago senegalensis), estos individuos provienen principalmente en el sur de Sahara, en particular en el oeste de Senegal. En ese sentido, en los ecosistemas de estas zonas este mono cumple labores ecológicas, tal como la dispersión semillas para su polinización.
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Al medir en promedio entre 2,20 y 2,90 metros, este es uno de los miembros de su especie más grandes del mundo. A pesar de su gran tamaño, son animales sociables y puede escapar a con facilidad a depredadores, como leones, entre otros.
Frente a su conservación, se estima que su población gira en torno a los 14 mil, por lo que actualmente esta especie se encuentra en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).
Mangabey gris
Los miembros de esta especie suelen vivir en comunidades entre los 70 y 120 individuos, en un sistema jerárquico línea. En ese sentido, las hembras, con una posición más elevada en el grupo, gastan menos tiempos en labores de forrajeo que otros miembros con posiciones inferiores.
Por su parte, estos monos viven principalmente en bosques secundarios, así como en manglares o en pantanos del noreste del continente africano. En ese sentido, esta especie se encuentra catalogada como vulnerable por la IUCN.
Potamoquero rojo
Este jabalí salvaje africano hace parte de la familia de los cerdos salvajes que habitan en África. Estos se caracterizan por su pelaje rojo y marcas blancas en torno a sus ojos, sus pómulos y sus mandíbulas.
Estos individuos son principalmente nocturnos, y pasan la mayoría de su tiempo en búsqueda de comida que hace parte de su dieta omnívora. De esta manera, algunos estudios indican que siguen a grupos de chimpancés en búsqueda frutas caídas. Aunque no se tiene un número estimado de su población, la IUCN estima que el principal riesgo para su conservación es la caza humana y la perdida de hábitat.
Delfín giboso atlántico
Los individuos de esta especie habitan en la costa atlántica de África, destacándose de por su giba protuberante en su aleta dorsal y por no ser delfines migratorios. En ese sentido, estos delfines miden en promedio dos metros y pesan entre 100 y 139 kilogramos.
Esta especie marina se encuentra actualmente catalogada con un riesgo grave de extinción. De esta manera, aunque las causas no son claras, se estima que la contaminación del mar y la sobrepesca ha incidido en el descenso de esta población.
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