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Beagle Freedom Project es una organización de bienestar animal comprometida con la salvación de animales que se encuentran en laboratorios. Recientemente, la organización cerró una instalación enfocada en experimentar con animales y que estaba ubicada en Nowata, Oklahoma, Estados Unidos.
La instalación realizaba pruebas en gatos y perros para la industria de medicamentos contra pulgas y garrapatas. Gracias a la iniciativa de Beagle Freedom Project, más de 200 animales evadieron el destino que les deparaba en el lugar. No obstante, la entidad no se conformó solo con este punto, sino que persistió hasta crearles un nuevo hogar, según informa Infobae.
Por ello, la organización busca inaugurar Freedom Fields, un santuario en el que aquellos animales que sufrieron explotación en laboratorios podrían vivir y esperar a ser adoptados por las personas responsables que deseen brindarles una vida digna.
Shannon Keith, fundadora de la entidad, afirmó que en la industria de pruebas de animales lo que era común era el sacrificar a los perros o gatos al finalizar los experimentos. No obstante, según le informó a la revista People, su entidad ha buscado cambiar esta norma, para salvar a cientos de animales y darles una nueva oportunidad.
Cada año, Keith escribe cartas a todas las instalaciones de experimentación animal en Estados Unidos, solicitando la entrega de estos seres sintientes a su entidad. Aunque admite que es extraño recibir respuesta, una de estas cartas logró su objetivo al convencer al propietario de un centro en Oklahoma, quien inicialmente había ignorado la solicitud, pero cambió de parecer gracias a las citaciones del United States Department of Agriculture (USDA).
Esta relación condujo a un acuerdo histórico: el cierre del negocio y la venta de las tierras al Beagle Freedom Project. Si bien Keith pensó que su propuesta sería recibida con incredulidad, el propietario accedió.
Posteriormente, los miembros de la entidad comenzaron a construir Freedom Fields. “Nuestra meta es asegurar que todos encuentren un hogar adoptivo. Mientras tanto, residen en nuestras instalaciones y estamos trabajando en renovarlas para crear un entorno hermoso donde puedan vivir hasta ser adoptados”, explicó Keith.
Varios de los animales que sufrieron durante años estos abusos nacieron en estos laboratorios, por lo que han estado en el mismo lugar durante toda su vida. Ellos tienen artritis, cataratas y otro tipo de afectaciones.
Por ello, la entidad busca construir un centro para mascotas ancianas, que cuente con camas ortopédicas, rampas, calefacción, entre otro tipo de comodidades, para que pasen sus días hasta que sean adoptados.
Según informa Infobae, el espacio también busca incluir un centro educativo, en donde las personas conocerán a los sobrevivientes de las pruebas animales, por lo que entenderán más sobre esta práctica.
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