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Las alergias en los gatos se manifiestan igual que en los humanos. Una alergia es una reacción fisiológica del organismo que surge cuando el sistema inmunológico detecta alguna sustancia nociva para el cuerpo.
En el caso de los felinos, las cosas más comunes que les producen alergia son: algunas plantas, hongos, polen, algunos alimentos o concentrado, humo de tabaco, perfumes, productos antipulgas, picaduras de pulga o mosquito, productos de limpieza para el hogar, materiales plásticos y, lo más increíble, los mismos humanos.
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De acuerdo con Michel Cardona, médico veterinario y Gerente de Desarrollo Técnico y Aprendizaje de Gabrica, usted puede saber que su gato es alérgico “cuando empieza a rascarse o a lagrimear después de que tuvo contacto con algo”.
Como son muchas las cosas que pueden generar alergia en su gato, también son muchos los síntomas para detectarla. Sin embargo, las más comunes y fáciles son: problemas respiratorios (como tos, gripe o estornudos), problemas de secreción nasal u ocular, picor en la nariz, ojos y cuerpo, caída de pelo, piel enrojecida o inflamada, infecciones cutáneas, vómito y diarrea.
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De acuerdo con Cardona, si usted ve que su mascota presenta alguno de estos síntomas, debe llevarlo de inmediato al médico veterinario.
Cuando la alergia es en la piel ocurre principalmente por la picadura de una pulga, un mosquito o abeja. Estos felinos acostumbran a estar limpios y cuando son picados por estos animales, sin duda la reacción alérgica es severa. Ellos empiezan a rascarse y, en medio de su desespero, pueden lastimarse la piel.
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Y cuando es una alergia al alimento “normalmente cursa que el paciente consume el alimento y empieza a rascarse, o le da vómito y diarrea. Entonces, toca mirar porque la mayoría de las alergias son producidas por las proteínas”, agregó el experto en animales a La Red Zoocial.
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🐱 Tratamiento para la alergia en gatos
Si su gato presenta algunos de los síntomas mencionados anteriormente, lo primero que debe hacer es llevarlo al veterinario para que lo examinen y lo remitan a un dermatólogo veterinario, quien se encargará de hacerle una serie de pruebas diagnósticas y comprobar a qué es alérgico efectivamente.
“Le sacan sangre y miden en el suero a qué es alérgico. Como pruebas de pellizco en la piel, como hacen en los humanos. Y también se hacen dietas de eliminación. Es decir, lo coloco con una dieta especial de proteína hidrolizada, que es una proteína muy pequeñita, que el intestino no la reconoce, por lo tanto, no produce alergia, pero sí le da la alimentación”, explicó Michel Cardona.
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Con esta dieta hidrolizada, el paciente deja de rascarse y ahí sí se procede a darle el anterior alimento para comprobar si es alérgico o no. Si llega a hacerlo, el médico veterinario le da una dieta específica.
Si es por problemas de piel, se recomienda el uso de champús especiales y antialérgicos. Y si es por problemas relacionados con los plásticos, lo más recomendable es cambiar los comederos y bebederos. Y si es por los productos de limpieza o belleza que usamos en casa, también cámbielos o no los use cuando el gato está presente. Recuerde: todo lo debe consultar primero con su veterinario, pues él sabe que es lo mejor para su gato.
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¿Y si su gato es alérgico a los humanos? Primero, es importante resaltar que el gato no es que sea alérgico a la persona, sino a su caspa y la descamación de su piel. “En este caso el veterinario proporcionará el tratamiento antialérgico adecuado y deberemos procurar tener nuestra casa lo más limpia posible en cuanto a polvo, pues es ahí donde se acumula nuestros restos de piel descamada que provocan la alergia a nuestro compañero”, explica el portal Experto Animal.
Y, por último, recuerde que su gato puede ser alérgico a cientos de plantas que, incluso, pueden ser tóxicas para él. Michel Cardona hace énfasis en la diferencia entre una alergia a las plantas y la toxicidad que producen estas en los gatos.
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“Las de alergia, pues es difícil porque es muy individual, ahí depende de cada paciente. Pero para la toxicidad sí hay un listado completo, que son más de 100 plantas a las que los gatos deben tener cuidado porque si las consumen se les daña el riñón y se mueren”. Lirios, amapolas, dedaleras, crisantemos, hiedra, jacinto son algunas de las plantas más venenosas para su gato.
Lo importante es que lleve de inmediato a su gato al veterinario para descartar cualquier problema grave. “Si, por ejemplo, veo que mi gato tiene los síntomas, pero no lo llevo ni siquiera hoy ni mañana ni el viernes, el gato empezará a rascarse en la piel de tal manera que se puede hacer unas laceraciones tan severas que produce una infección”.
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