
En un lugar donde muchos animales son invisibles, Kella y Andrea los han convertido en protagonistas. Aunque trabajan solos, su labor resuena como un acto de amor y resistencia.
Foto: @kellan__sai
En un rincón apartado de la isla de San Andrés, Alberto Rodrigo May Williams, más conocido como Kella, y su esposa Andrea Portilla sostienen, con esfuerzo, ingenio y un amor inquebrantable, un refugio que es hogar para más de 150 perros, gatos, caballos y otros animales en situación de vulnerabilidad. Desde hace más de 15 años, esta pareja ha construido allí un santuario donde cada vida tiene la oportunidad de recuperarse y vivir con dignidad. Lo que comenzó como un acto espontáneo de compasión, hoy es su proyecto de vida.
Una historia de amor por los animales
Andrea llegó a San...

Por Laura Tatiana Vargas Lizarazo
Comunicadora social y periodista con interés en temas sociales, culturales, de conflicto y construcción de paz. Ganadora del Premio Nacional de Periodismo, Mujeres, Paz y Seguridad 2021.@Tatiana71765621lvargas@elespectador.com