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Esta historia se volvió viral tras ser compartida por la usuaria de Instagram @future_dogter_maya, quien relató cómo sus padres investigaron cuidadosamente a un criador ético, registrado en el American Kennel Club (AKC), para adquirir dos cachorros de cane corso. Eligieron un criador con años de experiencia y confiaron en la documentación que garantizaba la pureza de la raza.
Según el sitio web del AKC, los criadores registrados pueden obtener certificados de registro para cada cachorro, como garantía de que cumplen con los estándares de la raza. Además, existe un programa de “Criador de Mérito” para quienes se destacan por su compromiso con la salud, el temperamento y el bienestar de los perros.
Sin embargo, a medida que los cachorros crecían, comenzaron a mostrar rasgos físicos y conductuales que no coincidían con los típicos de un cane corso. Algunas personas incluso comentaban que se parecían a labradores. Ante la duda, la familia decidió realizar una prueba de ADN para aclarar su linaje.
El resultado sorprendió a todos: los perros no eran cane corsos de raza pura. En realidad, se trataba de una mezcla que incluía rottweiler, dóberman, labrador y hasta bully.
La familia descubrió que los cachorros provenían de una camada accidental. Según relató Maya en redes sociales, el criador estaba entrenando a su hermano para también dedicarse a la crianza, y este tenía en casa un perro no castrado de una raza distinta. El cruce no intencional ocurrió sin que se dieran cuenta.
Al enterarse del error, los criadores ofrecieron llevarse a los cachorros y entregar nuevos ejemplares de cane corso de raza pura. No obstante, la familia ya se había encariñado profundamente con ellos y decidió quedarse con los perros.
“No es lo que pagamos, pero valió cada centavo que nos devolvieron”, escribieron en el pie de foto de una publicación que ya acumula más de 3 millones de vistas en Instagram.
Los comentarios en redes sociales no se hicieron esperar. Algunos usuarios bromearon diciendo que los perros parecían osos o incluso panteras. Otros compartieron sus propias experiencias con razas mixtas y el cariño que generan, independientemente de su pedigrí.
Este caso pone de relieve que, a veces, el valor de un perro no está en su linaje, sino en el vínculo que construye con su familia.
*Desde La Red Zoocial le recomendamos adoptar en lugar de comprar. En los refugios y fundaciones, hay millones de animales, incluso de raza, esperando un hogar para toda la vida.
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