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Un niño de dos años que pasó una noche solo en el desierto de Arizona fue encontrado sano y salvo gracias a un inesperado héroe: Buford, el perro guardián de un ranchero de la zona. El peludo escoltó al menor hasta un lugar seguro tras haber recorrido más de 11 kilómetros.
Según informó el medio de comunicación NBC News, la desaparición del pequeño fue reportada el lunes 14 de abril en la tarde, cerca de las 5:00 p.m., por la Oficina del Sheriff del Condado de Yavapai. El niño, al parecer, había salido de su casa en Seligman, una localidad remota con menos de 1.000 habitantes. Vestía solo una camiseta sin mangas y pantalones de pijama, según la alerta difundida por las autoridades.
De inmediato se desplegó un operativo de búsqueda con más de 40 rescatistas, agentes de los condados de Yavapai y Coconino, y personal del Departamento de Seguridad Pública de Arizona. A pesar de los esfuerzos durante la noche, con temperaturas que descendieron hasta los 4 °C y la presencia de pumas en la zona, no hubo rastros del niño.
Fue hasta la mañana del martes, 15 de abril, cuando Scotty Dunton, un ranchero del área, encontró al niño en su propiedad, acompañado por su perro guardián Buford. “Al salir de mi casa, vi a mi perro sentado junto a la entrada, y al mirar mejor, vi a un niño pequeño de pie junto a él”, relató Dunton al medio de comunicación mencionado.
Dunton explicó que su casa se encuentra a unos 11 kilómetros de la del menor y que están separadas por un terreno montañoso y valles profundos. Se presume que el pequeño siguió un sendero bajo líneas eléctricas. “Aun así, es increíble que haya llegado tan lejos solo”, dijo el hombre.
Según contó el niño, había dormido bajo un árbol en el campo donde pastan los caballos de Dunton. El menor también confirmó que el perro Buford lo encontró y lo acompañó durante su travesía nocturna. Este es un canino de la raza pirineo de anatolia.
“Es lo que hace. Ama a los niños. Me imagino que cuando lo vio, simplemente decidió quedarse con él”, dijo el hombre emocionado. Tras encontrarlo, llevó al niño a su casa, le dio agua y algo de comer, y llamó inmediatamente a las autoridades. Los agentes confirmaron que se trataba del menor desaparecido.
Aunque no se detalló si fue trasladado para recibir atención médica, el niño se encontraba en buen estado. La historia ha sido celebrada ampliamente en redes sociales, no solo por el milagroso desenlace, sino también por la valentía y heroísmo del peludo Buford.
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