¿Qué debo hacer si envenenaron a mi mascota? Le contamos cómo actuar

Los veterinarios sabrán mejor que nadie qué hacer en estos casos, no dude en contactar a alguno.

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En el transcurso del mes, la alcaldía de Marinilla, Antioquia, ha reunido a la comunidad de una de sus veredas debido a que se han presentado envenenamientos masivos de perros y gatos. Por el momento se han contabilizado cerca de 10 afectados y de estos, tres muertes de mascotas.

Los primeros casos aparecieron a inicios de mes, cuando las personas del sector de Cimarrones empezaron a notar que sus animales de compañía tenían evidentes síntomas de envenenamiento. Por ello, desde La Red Zoocial le contamos cómo saber si su mascota está en riesgo por consumir sustancias tóxicas perjudiciales a la salud y qué puede hacer para salvarla, mientras recibe atención veterinaria.

Inicialmente, tenga en cuenta que la intoxicación puede aparecer por varias causas, que pueden ser muy variadas, de acuerdo con Survet, centro de servicios veterinarios, por ejemplo:

• Medicamentos: como ácido acetilsalicílico, ibuprofeno y paracetamol, antidepresivos, ansiolíticos, anticoagulantes, fármacos para el control de las cardiopatías, de los problemas de atención y mucho más, ya que la mayoría de los medicamentos para humanos son tóxicos e incluso mortales para perros y gatos.
• Drogas: como cánnabis (marihuana, hachís), cocaína y de cualquier otro tipo.
• Vitaminas: A y D

Sin embargo, los expertos también aclaran que el envenenamiento puede surgir por el consumo de productos que están en el hogar y al alcance de todos, pero que generan efectos negativos en los animales. Tal es el cado de: arsénico, que está en insecticidas; champú o detergentes; cloro y lejías; chocolate, debido a que las mascotas no lo pueden metabolizar; pasas y uvas, que pueden ocasionar fallas renales agudas; cebolla y ajo, ya que genera anemia; entre otros.

¿Cómo sé si mi mascota está envenenada?

Solo por la sospecha de que el canino o felino fue envenenado, es necesario ir a un veterinario de forma inmediata. Además, si es posible recolecte el material sospechoso o implicado para que el profesional sepa cómo tratar a la mascota de una forma más precisa y acertada.

Según los veterinarios de Survet, los síntomas pueden ser muy variados y dependerán de la sustancia ingerida, pero algunos de ellos son: vómitos y diarreas con sangre, pupilas muy dilatadas, agitación y nerviosismo repentinos, saliva excesiva, fiebre (a partir de 39ºC), desorientación e inestabilidad, dolor y se lame con insistencia una parte del cuerpo, respirar con dificultad, aumento de la ingesta de agua y cantidad de micción fuera de lo habitual, convulsiones y temblores.

¿Qué hacer?

Los primeros auxilios son un gran aliado en estos casos, antes de llegar a las manos de un profesional. Pero, cuidado, nada de lo que encontrará a continuación puede reemplazar el conocimiento de un veterinario certificado.

Como expresan los expertos, es muy importante mantener la calma y actuar rápidamente. Asimismo, seguir estos pasos:

1. Si la mascota está muy débil o se ha desmayado, debe llevarle a una zona ventilada, levantando todo su cuerpo con cuidado.
2. Aparte la sustancia tóxica del animal y guárdela con cuidado, adoptando todas las precauciones necesarias para llevarla al veterinario.
3. Póngase en contacto con el veterinario. Cuanto antes lo haga, más probabilidades de supervivencia tendrá la mascota.
4. Escuche a su médico veterinario y siga al pie de la letra lo que le pida hacer, en especial si se trata de primeros auxilios.
5. Advertencia, es esencial que no le dé agua, comida, leche o aceite hasta saber qué tipo de veneno ha ingerido el perro o gato. Cualquier ingesta sin supervisión adecuada podrían tener un efecto perjudicial.
6. Si el profesional indica que debe hacer vomitar al animal, debe seguir unas pautas apropiadas. Atención: no siempre es conveniente la provocación del vómito.
7. Si el veterinario ha indicado que lo mejor es provocar el vómito, tenga presente que aunque se haya conseguido expulsar parte de la sustancia tóxica o veneno, es probable que otra porción haya sido absorbida por el intestino. Para intentar reducir las consecuencias de este en el organismo, ya en la veterinaria se aplicará la dosis adecuada de adsorbente, según las características de peso, edad e historial clínico de la mascota.
8. Si el envenenamiento se ha producido por vía tópica o cutánea, podrá realizar un cepillado adecuado para retirar la sustancia tóxica en forma de polvo y, posteriormente, proceder a un baño, para eliminar el resto de la sustancia. Este proceso requiere tomar una serie de precauciones, por lo tanto, es conveniente que lo realicen profesionales.
9. Si la contaminación se ha dado por el contacto de la sustancia con las mucosas, la piel o los ojos, será necesario seguir las indicaciones y aplicar agua abundante en la zona afectada. Igualmente, será necesario acudir al veterinario para diagnosticar el daño causado por la sustancia y pautar, si fuera necesario, una medicación.

Es muy importante que no provoque vómito si el peludo está semiinconsciente o desmayado, ya que esto podría generar asfixia. Tampoco haga que la mascota expulse lo que consumió si el veneno que ingirió es corrosivo, pues podría dañarlo el sistema digestivo y esto causa graves secuelas.