Sofía Vergara quiere una boda multitudinaria

Sofia Vergara en los premios Globo de Oro 2013. / AFP

Aunque Sofía Vergara y el empresario Nick Loeb llevan comprometidos desde el pasado verano y la colombiana ya luce con orgullo su anillo, la estrella de 'Modern Family' insiste en que no tiene ninguna prisa por pasar por el altar debido a que sus compromisos profesionales le mantienen demasiado atareada. Su pasiva actitud hacia la formalización de su relación no significa, sin embargo, que no esté ilusionada con el hipotético evento, sino que necesita dedicar todo el tiempo posible a su boda para que esta sea simplemente perfecta.

"Ahora mismo no tengo tiempo para concentrarme en ello y, además, necesitaría que la ceremonia tuviera lugar durante un fin de semana o unas vacaciones en las que esté completamente libre. Esa sería la única forma de que pudiéramos planear algo divertido con lo que me sienta identificada, pero por el momento ni siquiera he pensado en lo que quiero hacer. Eso sí, si me animo a hacer algo tiene que ser algo grande. Hace poco celebré mi 40 cumpleaños en México y tuve a unas cien personas conmigo", desveló a la revista People.

Vergara quiere hacer de su boda una auténtica fiesta, por lo que ignorará en el convite los tradicionales discursos y cualquier otro tipo de formalidad. Fiel a las espontáneas celebraciones que protagoniza en las galas de premios, a las que suele acudir con una gran representación de familiares, su enlace estará caracterizado por la música, el baile y "mucha comida".

"Nosotros no tenemos ese tipo de tradiciones, por lo que queremos que sea una auténtica fiesta con mucha comida, música, baile y diversión. Queremos evitar a toda costa estar sentados durante tres horas escuchando discursos", añadió.

No obstante, si Sofía Vergara sigue posponiendo su boda durante mucho tiempo, es posible que su hijo Manolo se le adelante y le dé una sorpresa, ya que está inmerso en una sólida relación sentimental con una joven latina. A pesar de que la orgullosa madre está entusiasmada con su nuera, no puede evitar sentir cierta nostalgia por los efectos del paso del tiempo.

"Sí, es horrible, pero ese es el rumbo natural de la vida y entonces toca acomodarse. Yo estoy muy contenta con la novia de Manolo. Es estadounidense y mitad portorriqueña, así que tiene sabor latino", confesó recientemente a la cadena Univisión.