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¿Sabe cuál es su tipo de pelo? Aquí le enseñamos a identificarlo

La forma del cabello se clasifica en cuatro grupos principales y cada uno de ellos se divide en tres subtipos.

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Redacción Moda
12 de julio de 2025 - 04:00 p. m.
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Durante muchos años las rutinas capilares han sido generalizadas, desconociendo las necesidades específicas de cada tipo de pelo.

Eso ha causado que muchas personas no tengan su cabello saludable y sano, pues no se realizan el cuidado adecuado.

Por eso, las investigaciones están visibilizando la importancia de entender la textura y los patrones de cada una de las estructuras capilares.

De acuerdo con datos del Laboratorios Genesse, 8 de cada 10 personas aseguran sentirse mucho mejor cuando están a gusto con su cabello y el peinado que lleva.

Así las cosas, entender la diversidad capilar, las características y texturas está permitiendo que las personas aprendan a cuidarlo, lo que aporta a su bienestar y confianza.

El estudio del pelo realizado por Dyson, una empresa global y familiar fundada en 1993 y dedicada a la investigación y tecnología capilar, profundiza en las características y necesidades de los distintos tipos de cabello.

Vale la pena mencionar que la forma del cabello se clasifica en cuatro grupos principales (1, 2, 3 y 4). Cada uno de ellos se divide en tres subtipos (A, B y C) que describe la intensidad del patrón del rizo, siendo la A la forma más suelta.

Estos son algunas generalidades del estudio de pelo de Dyson:

  • Tipo 1 (liso a ondulado): el pelo más liso tiene un corte transversal redondo.
  • Tipo 2 (ondulado a rizado): suele describirse como con ondas en S con un corte transversal redondo, pero más plano que el del tipo 1.
  • Tipo 3 (rizado con bucles más apretados): puede sufrir sequedad por la falta de sebo a lo largo del tallo del cabello. Es importante no aplicar calor excesivo al peinarlo, y es crucial retener el máximo de grasa natural posible.
  • Tipo 4 (de cabello rizado a muy rizado): Este tipo tiene una forma más plana y elipsoidal que crea rizos muy definidos. Es más fácil que estos se enreden y pueden ser frágiles si se les aplica calor excesivo.

Tenga en cuenta que tanto la frecuencia con la que se debe lavar hasta las herramientas más recomendadas para cuidarlo dependen del tipo de cabello.

“Conocer sus características permite tomar decisiones más acertadas y evitar errores comunes en la rutina capilar”, explican desde Dyson.

De acuerdo con el estudio de la compañía, “los cabellos tipo 1 y 2 (más lisos y ondulados) suelen requerir lavados más frecuentes, debido a que el sebo del cuero cabelludo se distribuye con mayor facilidad hasta las puntas, lo que puede generar una apariencia grasa”.

En cambio, “los tipos 3 y 4 (más rizados y crespos) tienden a presentar mayor sequedad, ya que la curvatura del pelo dificulta que el sebo recorra toda la fibra capilar. Por eso, en estos casos, se recomienda espaciar los lavados para evitar eliminar los aceites naturales que lo protegen”.

La rutina de peinado también debe adaptarse según el tipo de cabello, pues cada textura enfrenta retos diferentes. Por ejemplo, “los cabellos tipo 1 (lisos) suelen luchar con la falta de volumen y la dificultad para mantener peinados por mucho tiempo. Los tipo 2 (ondulados) necesitan definición sin apelmazar, mientras que los tipo 3 (rizados) requieren productos y técnicas que controlen el frizz sin sacrificar movimiento. En el caso del tipo 4 (crespo o afro), la clave está en mantener una hidratación constante y evitar la manipulación excesiva que pueda debilitar la fibra capilar”, explica la empresa.

¿Secar el cabello al aire libre o con herramientas especializadas?

De acuerdo con Dyson, se ha comprobado que secar el cabello con herramientas especializadas es más recomendable que dejarlo secar al aire libre, “debido a que el pelo mojado es más vulnerable y el exceso de humedad en el cuero cabelludo puede favorecer la aparición de hongos”.

Sin embargo, es fundamental tener precaución con el uso de calor excesivo, pues las altas temperaturas pueden aumentar la porosidad del cabello, es decir, “alterar su capacidad de retener y absorber agua de forma equilibrada, afectando la durabilidad del peinado y debilitando la estructura del cabello”, agrega la marca.

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Por Redacción Moda

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