Agencia de viajes frustró sueño mundialista de 200 mexicanos

Varias decenas de mexicanos que pagaron su viaje a Sudáfrica para ver el debut de su selección en el Mundial de fútbol tuvieron que resignarse a seguir por televisión el partido inaugural del campeonato al ser abandonados por sus agencias de viajes.

A estos aficionados, alrededor de 200, no les quedó más remedio que ponerse la camiseta de su selección y seguir en sus casas o en algún restaurante de Ciudad de México el partido en el que Sudáfrica y México empataron a un gol.

"Estoy triste, enojado, contrariado, desesperado porque nos rompieron la ilusión y ahora no nos queda más que resignarnos y verlo por televisión", dijo Jorge Mendoza un hincha que tenía previsto viajar la madrugada de ayer a Sudáfrica con su esposa y el resto de los aficionados.

La víspera, estas personas quedaron desamparadas en el Aeropuerto de la Ciudad de México por las agencias Mundomex, Supertravel y Cuevas Viajes, encargadas de vender en México paquetes del Mundial. Ahí, durmieron, comieron y hasta muchos de ellos compraron de última hora sus playeras (camisetas) de la selección.

Las agencias de viajes les prometieron fletar un avión "que nunca llegó" por una supuesta falla mecánica, lo que les frustró su sueño de presenciar en directo el debut de su selección en el Mundial, en el estadio Soccer City de Johannesburgo.

Mendoza, un electricista jubilado de Veracruz, ahorró durante un año para poder pagar casi 100.000 pesos (unos 7.900 dólares) y cumplir con su sueño mundialista, que finalmente se frustró.

Al igual que Mendoza y su esposa, otras decenas de personas no saben "si llorar de coraje" por no poder asistir al partido o porque no saben aún cómo recuperarán su dinero.

"La tristeza me embarga y más cuando mis compadres, que al igual que yo compramos los asientos de la fila 18, si pudieron llegar y yo como consecuencia de esta mala pasada quizá pueda ir pero a los siguientes partidos", dijo el contador Pedro Barrera, otro aficionado que asegura que lo único que le queda es guardar en una vitrina sus boletos de la inauguración.

Este hincha aseguró tras lo ocurrido que no perdona a la agencia de viajes por la "amarga" experiencia vivida.

Tras las denuncias presentadas por estos aficionados, ayer se detuvo a Manuel Rafael Redondo, apoderado de la empresa Súper Travel, una de las tres agencias que vendieron en México centenares de paquetes y se encuentra en prisión preventiva a la espera de ver si "incurrió en un incumplimiento de contrato o fraude".

En tanto Alejandro Hernández, tío del detenido, aseguró que la empresa cumplirá el contrato con los aficionados y que devolverán el dinero a quienes no estén de acuerdo. Según esta agencia la culpable del incumplimiento es la empresa canadiense Worldwide Charter.

Esta situación obligó que las agencias de viajes firmaran anoche un compromiso de contrato, ante la presencia de las autoridades mexicanas, para que en los próximos días sean llevados a Sudáfrica, aunque para muchos de los afectados ya no será lo mismo.

"Estamos aquí perdiéndonos la oportunidad de estar en la inauguración del Mundial. Nos ofrecen opción para salir del 15 al 30 próximos y tratar de compensarnos con otras entradas a cualquier partido de los octavos de final pero para mí el 80% del viaje era la inauguración", explicó otro aficionado.

En Johannesburgo se encuentran miles de mexicanos que llegaron a Sudáfrica por su cuenta o a través de otras empresas de viajes para acompañar a su selección nacional.

Varias decenas de mexicanos que pagaron su viaje a Sudáfrica para ver el debut de su selección en el Mundial de fútbol tuvieron que resignarse a seguir por televisión el partido inaugural del campeonato al ser abandonados por sus agencias de viajes.

A estos aficionados, alrededor de 200, no les quedó más remedio que ponerse la camiseta de su selección y seguir en sus casas o en algún restaurante de Ciudad de México el partido en el que Sudáfrica y México empataron a un gol.

"Estoy triste, enojado, contrariado, desesperado porque nos rompieron la ilusión y ahora no nos queda más que resignarnos y verlo por televisión", dijo Jorge Mendoza un hincha que tenía previsto viajar la madrugada de ayer a Sudáfrica con su esposa y el resto de los aficionados.

La víspera, estas personas quedaron desamparadas en el Aeropuerto de la Ciudad de México por las agencias Mundomex, Supertravel y Cuevas Viajes, encargadas de vender en México paquetes del Mundial. Ahí, durmieron, comieron y hasta muchos de ellos compraron de última hora sus playeras (camisetas) de la selección.

Las agencias de viajes les prometieron fletar un avión "que nunca llegó" por una supuesta falla mecánica, lo que les frustró su sueño de presenciar en directo el debut de su selección en el Mundial, en el estadio Soccer City de Johannesburgo.

Mendoza, un electricista jubilado de Veracruz, ahorró durante un año para poder pagar casi 100.000 pesos (unos 7.900 dólares) y cumplir con su sueño mundialista, que finalmente se frustró.

Al igual que Mendoza y su esposa, otras decenas de personas no saben "si llorar de coraje" por no poder asistir al partido o porque no saben aún cómo recuperarán su dinero.

"La tristeza me embarga y más cuando mis compadres, que al igual que yo compramos los asientos de la fila 18, si pudieron llegar y yo como consecuencia de esta mala pasada quizá pueda ir pero a los siguientes partidos", dijo el contador Pedro Barrera, otro aficionado que asegura que lo único que le queda es guardar en una vitrina sus boletos de la inauguración.

Este hincha aseguró tras lo ocurrido que no perdona a la agencia de viajes por la "amarga" experiencia vivida.

Tras las denuncias presentadas por estos aficionados, ayer se detuvo a Manuel Rafael Redondo, apoderado de la empresa Súper Travel, una de las tres agencias que vendieron en México centenares de paquetes y se encuentra en prisión preventiva a la espera de ver si "incurrió en un incumplimiento de contrato o fraude".

En tanto Alejandro Hernández, tío del detenido, aseguró que la empresa cumplirá el contrato con los aficionados y que devolverán el dinero a quienes no estén de acuerdo. Según esta agencia la culpable del incumplimiento es la empresa canadiense Worldwide Charter.

Esta situación obligó que las agencias de viajes firmaran anoche un compromiso de contrato, ante la presencia de las autoridades mexicanas, para que en los próximos días sean llevados a Sudáfrica, aunque para muchos de los afectados ya no será lo mismo.

"Estamos aquí perdiéndonos la oportunidad de estar en la inauguración del Mundial. Nos ofrecen opción para salir del 15 al 30 próximos y tratar de compensarnos con otras entradas a cualquier partido de los octavos de final pero para mí el 80% del viaje era la inauguración", explicó otro aficionado.

En Johannesburgo se encuentran miles de mexicanos que llegaron a Sudáfrica por su cuenta o a través de otras empresas de viajes para acompañar a su selección nacional.