Chile regularizó a más de 17.000 migrantes colombianos
Chile finalizó su proceso extraordinario de regularización de migrantes. A lo largo de tres meses la situación de 155.707 extranjeros, entre esos más de 17.000 colombianos, fue normalizada.
-Redacción Internacional
El pasado lunes concluyó en Chile el proceso extraordinario de regularización de migrantes, que se llevó a cabo entre el 23 de abril y el 23 de julio del presente año.
El Presidente Sebastián Piñera dio a conocer hoy que durante estos tres meses se inscribieron un total del de 155.707 extranjeros.
Entre los inmigrantes que han llegado al país dentro del proceso extraordinario hay 87.353 hombres y 68.324 mujeres. De ellos, 139.420 personas son mayores de edad y 16.278 son menores de edad.
(Le puede interesar: Chile, ¿el nuevo sueño americano?)
Colombia se encuentra entre las cinco nacionalidades con mayor inscripción al país, ocupando el cuarto lugar con 17.968 solicitudes. Por encima se encuentran Haití, con más de 49.000 solicitudes; Venezuela, con 31.682 y Perú, con 22.819. En el quinto lugar se encuentra Bolivia con un total de 14.941 solicitantes.
Con el proceso de regularización, los inscritos recibirán una visa temporal por un año cuando presenten su formulario de inscripción y su certificado de antecedentes penales de su país de origen y de Chile. Asimismo, esta visa podrá ser extendida por 12 meses más, si el solicitante cumple con las condiciones establecidas.
(Ver más: Chile entrega 3.000 visas a extranjeros ilegales en medio de ola migratoria)
De igual forma, a lo largo de este proceso extraordinario de regularización se continuó con el proceso regular de entrega de visas a extranjeros, en el que en los 90 días más de 108.500 personas solicitaron visas temporarias, sujetas a contratos y de estudiantes. La gran mayoría fue de tipo “Temporaria por motivos laborales”.
Finalizado el proceso de obtención de visas, estas personas tendrán una cédula de identidad con la que podrán tener contratos de trabajo, arrendar una propiedad, tener una cuenta en el banco e integrarse de forma plena al país.
El proceso se enmarca en un interés por parte del gobierno chileno de recibir a quienes puedan aportar con su trabajo y su cultura arraigándose en Chile, y controlar el ingreso irregular de “aquellos que vienen a cometer delitos y hacerle daño a nuestra sociedad” según informó presidencia en un comunicado.
El pasado lunes concluyó en Chile el proceso extraordinario de regularización de migrantes, que se llevó a cabo entre el 23 de abril y el 23 de julio del presente año.
El Presidente Sebastián Piñera dio a conocer hoy que durante estos tres meses se inscribieron un total del de 155.707 extranjeros.
Entre los inmigrantes que han llegado al país dentro del proceso extraordinario hay 87.353 hombres y 68.324 mujeres. De ellos, 139.420 personas son mayores de edad y 16.278 son menores de edad.
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Colombia se encuentra entre las cinco nacionalidades con mayor inscripción al país, ocupando el cuarto lugar con 17.968 solicitudes. Por encima se encuentran Haití, con más de 49.000 solicitudes; Venezuela, con 31.682 y Perú, con 22.819. En el quinto lugar se encuentra Bolivia con un total de 14.941 solicitantes.
Con el proceso de regularización, los inscritos recibirán una visa temporal por un año cuando presenten su formulario de inscripción y su certificado de antecedentes penales de su país de origen y de Chile. Asimismo, esta visa podrá ser extendida por 12 meses más, si el solicitante cumple con las condiciones establecidas.
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De igual forma, a lo largo de este proceso extraordinario de regularización se continuó con el proceso regular de entrega de visas a extranjeros, en el que en los 90 días más de 108.500 personas solicitaron visas temporarias, sujetas a contratos y de estudiantes. La gran mayoría fue de tipo “Temporaria por motivos laborales”.
Finalizado el proceso de obtención de visas, estas personas tendrán una cédula de identidad con la que podrán tener contratos de trabajo, arrendar una propiedad, tener una cuenta en el banco e integrarse de forma plena al país.
El proceso se enmarca en un interés por parte del gobierno chileno de recibir a quienes puedan aportar con su trabajo y su cultura arraigándose en Chile, y controlar el ingreso irregular de “aquellos que vienen a cometer delitos y hacerle daño a nuestra sociedad” según informó presidencia en un comunicado.