El mandatario chino, Xi Jimping, ha buscado durante el último tiempo aumentar su influencia geopolítica, especialmente en su relación con India. / EFE
Foto: EFE - WU HONG
El año 2020 será recordado no solo por la crisis del COVID-19 y el fin de la presidencia de Donald Trump en Estados Unidos, sino también como el inicio del ajuste de cuentas con China. Con su reputación internacional dañada por la pandemia y una creciente resistencia a sus avances territoriales, China está perdiendo rápidamente capacidad para perseguir sus ambiciones geopolíticas. Y en ningún lugar es más evidente que en las relaciones con India.