ONU, lista a apoyar el posconflicto

El presidente Juan Manuel Santos y el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, sostuvieron una reunión en la que el organismo multilateral ofreció al Estado colombiano su ayuda para la consolidación del posconflicto. Algunos mecanismos de cooperación hicieron parte de la discusión; sin embargo, sólo se aplicarán si la mesa de conversaciones con las Farc en La Habana (Cuba) los acepta.

De acuerdo con fuentes del Gobierno, esos ofrecimientos de cooperación estarían destinados a la financiación de los acuerdos, la verificación del desarme, las garantías de cese al fuego y la participación de misiones especiales de paz.

“Nos hicieron una presentación técnica sobre lo que puede hacer Naciones Unidas por el proceso de paz. Hablamos del cambio climático y, en tercer lugar, (Ban) me manifestó el inmenso interés que tiene sobre la participación de Colombia en las misiones de paz de la ONU”, dijo Santos al término del encuentro.

Sin embargo, según sostuvo la delegación diplomática del Gobierno, la participación de las Fuerzas Militares y la Policía en esas misiones sólo podrá darse cuando se haya firmado un acuerdo con las guerrillas. A juicio del Ejecutivo, no tendría sentido participar hacerlo si en el país persiste la guerra.

Santos advirtió también que los medios de comunicación malinterpretaron al jefe del equipo negociador en Cuba, Humberto de la Calle, cuando se refirió a que la polarización haría inviable un acuerdo de paz. “Fueron unas declaraciones para el escenario de Miami. Allí hay una comunidad cubana y una venezolana a las que no les gusta que sus gobiernos estén facilitando el proceso de paz. En Colombia lo interpretaron como si fuera un mensaje para el país, y eso no es así”, dijo Santos.

Asimismo sostuvo que el acuerdo con las Farc sobre la solución al problema de las drogas fue celebrado por el secretario general y que, en ese sentido, los documentos elaborados la semana pasada en la Organización de Estados Americanos se convertirán en insumo para “un cambio en las políticas de drogas que el mundo necesita”.

Finalmente, el mandatario colombiano se refirió a otros dos temas espinosos: la justicia transicional para los uniformados involucrados en crímenes y el modelo agrario que el Gobierno busca impulsar. Frente a lo primero, explicó que no hay posibilidad de que las violaciones de derechos humanos cometidas por militares sean juzgadas por tribunales militares, y sobre lo segundo, dijo que se está trabajando en una legislación que permita que los extranjeros compren, pero no en exceso.

El presidente Juan Manuel Santos y el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, sostuvieron una reunión en la que el organismo multilateral ofreció al Estado colombiano su ayuda para la consolidación del posconflicto. Algunos mecanismos de cooperación hicieron parte de la discusión; sin embargo, sólo se aplicarán si la mesa de conversaciones con las Farc en La Habana (Cuba) los acepta.

De acuerdo con fuentes del Gobierno, esos ofrecimientos de cooperación estarían destinados a la financiación de los acuerdos, la verificación del desarme, las garantías de cese al fuego y la participación de misiones especiales de paz.

“Nos hicieron una presentación técnica sobre lo que puede hacer Naciones Unidas por el proceso de paz. Hablamos del cambio climático y, en tercer lugar, (Ban) me manifestó el inmenso interés que tiene sobre la participación de Colombia en las misiones de paz de la ONU”, dijo Santos al término del encuentro.

Sin embargo, según sostuvo la delegación diplomática del Gobierno, la participación de las Fuerzas Militares y la Policía en esas misiones sólo podrá darse cuando se haya firmado un acuerdo con las guerrillas. A juicio del Ejecutivo, no tendría sentido participar hacerlo si en el país persiste la guerra.

Santos advirtió también que los medios de comunicación malinterpretaron al jefe del equipo negociador en Cuba, Humberto de la Calle, cuando se refirió a que la polarización haría inviable un acuerdo de paz. “Fueron unas declaraciones para el escenario de Miami. Allí hay una comunidad cubana y una venezolana a las que no les gusta que sus gobiernos estén facilitando el proceso de paz. En Colombia lo interpretaron como si fuera un mensaje para el país, y eso no es así”, dijo Santos.

Asimismo sostuvo que el acuerdo con las Farc sobre la solución al problema de las drogas fue celebrado por el secretario general y que, en ese sentido, los documentos elaborados la semana pasada en la Organización de Estados Americanos se convertirán en insumo para “un cambio en las políticas de drogas que el mundo necesita”.

Finalmente, el mandatario colombiano se refirió a otros dos temas espinosos: la justicia transicional para los uniformados involucrados en crímenes y el modelo agrario que el Gobierno busca impulsar. Frente a lo primero, explicó que no hay posibilidad de que las violaciones de derechos humanos cometidas por militares sean juzgadas por tribunales militares, y sobre lo segundo, dijo que se está trabajando en una legislación que permita que los extranjeros compren, pero no en exceso.