La violencia estalló el sábado en el centro penitenciario Santa Ana en la ciudad de San Cristóbal, al suroeste de Caracas. Según dijo el ministro del Interior y Justicia, Pedro Carreño, los detenidos intentaron tomarse el poder.
Carreño explicó que la reyerta se produjo luego de que un grupo de prisioneros tomó como rehenes a algunos parientes que hacían la visita. También dijo que los responsables serían un grupo de paramilitares presos, también responsable de las muertes del director y subdirector de esa prisión, ocurridas en abril.
La violencia es común en las prisiones venezolanas atestadas de reos y con falta de personal. El Observatorio Venezolano de Prisiones, organización no gubernamental que vela por los derechos humanos de los presos, asegura que son aproximadamente 800 los fallecidos dentro del sistema penitenciario durante los últimos dos años.