El "hombre árbol" de Bangladesh regresa al hospital para nuevas cirugías

Los médicos del hospital universitario de Daca creyeron que el joven, de 28 años, estaba curado. Sin embargo, las verrugas en sus manos han vuelto a aparecer.

- AFP
22 de enero de 2019 - 12:52 p. m.
Se cree que menos de una docena de personas en el mundo tiene esta rarísima enfermedad genética de la piel, epidermodisplasia verruciforme.  / AFP
Se cree que menos de una docena de personas en el mundo tiene esta rarísima enfermedad genética de la piel, epidermodisplasia verruciforme. / AFP

Un bangladesí conocido como "el hombre-árbol" por sus impresionantes verrugas en forma de cortezas en las manos y los pies, regresó a un hospital de Daca donde se someterá a nuevas cirugías para quitárselas, indicaron sus médicos el martes.

Se cree que menos de una docena de personas en el mundo tiene esta rarísima enfermedad genética de la piel, epidermodisplasia verruciforme. Pero en Abul Bajandar, de 28 años, la enfermedad es particularmente agresiva.

Lea: El “hombre árbol” tiene nuevas manos

Bajandar ya se sometió a 25 cirugías desde 2016. Las excrecencias le deforman las manos por lo que no las puede utilizar, desde hace años no puede trabajar. Más de una vez los médicos del hospital universitario de Daca creyeron que el joven de 28 años estaba curado. Pero las verrugas siempre regresaron.

"Su condición se deterioró y pienso que se necesitarán nuevas operaciones", declaró Samanta Lal Sen, cirujano del nosocomio.

"Las verrugas crecieron en nuevos lugares de mis pies y mis manos (...). Espero que los doctores puedan curarme completamente esta vez", declaró el hombre. "Recibí el amor de mis compatriotas y de nuestra primera ministra. Creo que un día podré vivir como un hombre normal", agregó.

En 2016, el cirujano que lo trata había explicado lo díficil que resultaba intervenir quirúrgicamente al hombre debido a su condición. “Era muy complicado saber dónde estaban los dedos, los vasos sanguíneos. Había mucho riesgo de crear complicaciones. Es un logro y hemos demostrado que si lo intentamos, en Bangladesh podemos hacer un buen trabajo", dijo entonces Lal Sen.

Este mismo hospital de Daca trató en 2017 a una joven bangladesí que sufría la misma condición.

Los médicos le habían retirado en un primer momento todas las excrecencias, pero volvieron luego a aparecer en más lugares. Su familia puso fin a su tratamiento y lo llevó a su pueblo.

Por - AFP

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