Fuerzas Militares ponen en la mira el motor de la violencia en Colombia: el narcotráfico

El Gobierno Nacional se ha propuesto desarticular las estructuras criminales y afectar sus economías ilícitas, que alimentan las organizaciones terroristas.

* Redacción Especiales
20 de noviembre de 2019 - 11:00 a. m.
Cortesía
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Erradicando el mal

El narcotráfico ha sido el principal problema con el que Colombia ha tenido que lidiar durante décadas. Su relación directa con el financiamiento de los Grupos Armados Organizados es la principal razón para erradicar definitivamente el mayor cáncer del país. Es por eso que el Gobierno Nacional se ha propuesto desarticular las estructuras criminales y afectar sus economías ilícitas, que alimentan las organizaciones terroristas.

El gobierno del presidente Iván Duque presentó en diciembre de 2018 la Política Integral ‘Ruta Futuro’, bajo la cual se direccionan todas las operaciones de erradicación de cultivos ilícitos, destrucción de laboratorios e interdicción marítima y aérea que realizan las Fuerzas Militares de Colombia, empleando sus capacidades en la lucha contra el narcotráfico, encaminadas a cumplir con los objetivos que plantea esta política.

Presentada como una lucha integral y una tarea de constante trabajo, esta directriz ha permitido incrementar los esfuerzos de las Fuerzas Militares en las labores de erradicación para detener el crecimiento exponencial de los cultivos ilícitos por primera vez en siete años, implementando estrategias como el aumento de grupos de erradicación manual pasando de 23 a 150 en todo el territorio nacional.

En el último año, las Fuerzas Militares y la Policía Nacional se propusieron erradicar 80.000 hectáreas de cultivos ilícitos, meta que han cumplido en un 89,5%, al llegar a las zonas más afectadas por este flagelo, catalogadas en su mayoría dentro de las ‘Zonas Futuro’. Estas son áreas estratégicas donde las entidades del Estado se han comprometido a llevar una transformación oportuna, mediante el control institucional y la disminución del impacto que tienen las economías ilícitas, la violencia y la criminalidad.

Sin embargo, esta modalidad de erradicación se ha convertido en una problemática social en la cual 7 soldados y 2 policía han perdido la vida y más de 51 erradicadores y miembros de la Fuerza Pública han resultado heridos y mutilados por las minas antipersonal que custodian los cultivos y que dificultan la erradicación de los mismos.

Otra de las estrategias para combatir el narcotráfico es la Estrategia ‘Red Naval’, la cual está liderada por el Comando General de las Fuerzas Militares y con la cual, la Armada de Colombia busca mantener un adecuado control del mar y de los ríos en territorios donde el narcotráfico está presente. Esta iniciativa ejecuta operaciones de interdicción multimodal en los ríos, puertos y toda clase de concentraciones de agua que tiene Colombia, para demostrar la presencia institucional y detener el tráfico y movimiento de sustancias psicoactivas en el país.

A través de la Campaña Naval, Marítima y Fluvial ‘Orión’, que se lleva a cabo en conjunto con el Ejército Nacional y con la Fuerza Aérea Colombiana, y en coordinación con la Fiscalía General de la Nación y agencias internacionales la Armada de Colombia ha logrado la incautación de 143.5 toneladas de clorhidrato de cocaína, 37 toneladas de marihuana y 615 capturados, reafirmando que el transporte marítimo es uno de los preferidos por los criminales, que a través de este delito sustentan las acciones terroristas de los Grupos Armados Organizados.

Así mismo, en desarrollo de operaciones especiales, en las que trabajan en conjunto el Ejército Nacional, la Armada de Colombia y la Fuerza Aérea Colombiana, y coordinadas con la Policía Nacional, se han destruido más de 4.500 laboratorios para el procesamiento de clorhidrato de cocaína, un 50% más que los destruidos el año inmediatamente anterior.

La Fuerza Aérea Colombiana también actúa como un emisario de información, al identificar zonas de trazas; áreas en las que se puede estar presentando tráfico de drogas y que por diferentes motivos no son de fácil acceso para las aeronaves militares. El trabajo entonces consiste en dar a conocer la existencia y traslado de posibles aviones ilegales a países identificados como puntos de parada en las rutas del narcotráfico.

Como resultado general, en lo corrido del 2019 la Fuerza Pública ha logrado la incautación de más de 327 toneladas de cocaína que pretendían llegar a destinos como Centroamérica, Estados Unidos y Europa.

Diferentes instituciones nacionales e internacionales como la Fiscalía General de la Nación y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), han aportado a la lucha contra el narcotráfico y han contribuido al fortalecimiento de los resultados gubernamentales contra este delito, permitiendo que las autoridades colombianas tengan un mayor control en la defensa activa de fronteras para contener el tráfico de drogas.

Por * Redacción Especiales

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