El vuelo TK2348 Estambul-Izmir, que llevaba 112 pasajeros, fue impactado por un rayo en la turbina derecha, lo que produjo un incendio al instante. (ver video 1)
El hecho ocurrió cuando la aeronave se disponía a aterrizar, sin embargo, el comandante a bordo se convirtió en un héroe al mantener la calma y seguir la trayectoria correcta mientras lo hacía descender.
Desde tierra el avión se vio como una bola de fuego que cruzaba los cielos. (ver video 2)
La hazaña del piloto permitió que, tras una serie de difíciles maniobras, el aparato aterrizara a medianoche en el aeropuerto turco de Adnan Menderes.
Los bomberos lograron apagar el fuego y evacuar a los pasajeros y la tripulación.
Afortunadamente no hubo víctimas mortales ni heridos.
Por El Espectador
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