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Un video que se ha hecho viral en redes sociales muestra un presunto caso de discriminación contra una mujer afroamericana en Florida, en Estados Unidos. Una mujer latina trabajadora de la tienda de comidas rápidas, Taco Bell, se negó a atender a una clienta porque no realizaba el pedido en español.
La clienta, Alexandria Montgomery, grabó la situación y publicó el video en su cuenta de Facebook. Allí se ve cuando, en la ventana del “Drive Thru” (servicio para autos) de una sucursal de esta tienda en la población de Hialeah, al norte de Miami, la trabajadora del local le informa a la mujer que no le puede tomar el pedido porque no habla inglés.
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Montgomery persistió y le dijo a la mujer que así no hablara inglés le podía tomar el pedido porque conocía el menú, a lo cual la trabajadora se negó.
La mujer, que se identificó como “Luisa”, le indicó a su clienta en repetidas ocasiones que nadie allí hablaba inglés y que tenía que retirarse. Compañeras de ella en el local se acercaron para ver lo que sucedía y “Luisa” les manifestó: “Sí entiendo, pero no quiero”.
Cuando Montgomery preguntó por el gerente de la sucursal, la trabajadora le respondió: “Está durmiendo en su casa”, por lo cual se evidencia, además, que la mujer sí entendía lo que decía su clienta, lo cual escribió Montgomery en el mensaje que acompaña el video, acusando de racismo a la mujer.
Pese a la protesta de la mujer, la trabajadora permaneció tranquila, frente a lo cual la clienta no tuvo más remedio que retirarse no sin antes preguntarle el nombre y advertirle que al día siguiente regresaría.
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Luego de que el video se hizo viral, -ya cuenta con más de 300 mil reproducciones y ha sido compartido más de seis mil veces- Taco Bell comunicó a medios estadounidenses que la mujer fue despedida.
Montogomery, en la publicación de Facebook, afirmó que el nombre real de la mujer no era “Luisa” como se había identificado.
En Hialeah, de acuerdo con la información del censo más reciente (2010), cerca del 95% de la población es hispanohablante, motivo por el cual, probablemente, la trabajadora le dijo a su clienta "esto es Hialeah, lo siento".