Arrancan sanciones económicas a circulación de vehículos de carga por la Calle 13, en Bogotá

Durante el primer mes de pruebas aumentó un 35 % la velocidad de ingreso a la Calle 13, pasando de 20 a 30 kilómetros por hora, según cifras del Distrito. / Archivo El Espectador.

Tras un mes de pruebas piloto y comparendos pedagógicos, este lunes empezaron a imponerse sanciones económicas a los conductores de algunos vehículos de carga pesada que transiten por la Calle 13 entre 6:00 a.m. y 8:00 a.m. La medida, que persigue resultados en movilidad y medio ambiente, busca mejorar la velocidad promedio del corredor entre un 24 % y un 37 %. Durante el primer mes de pruebas, la Policía de Tránsito impuso 96 comparendos pedagógicos a los conductores que no acataron la restricción, pero a partir de ahora se interpondrán sanciones de $390.600 y el vehículo será inmovilizado.

De acuerdo con cifras de la Secretaría de Movilidad, durante los monitoreos y análisis del piloto se evidenció un aumento de un 35 % en la velocidad de ingreso a la Calle 13, al pasar de 20 a 30 kilómetros por hora, en promedio. Esta reducción beneficia a unos 15.000 pasajeros del transporte intermunicipal que ingresan a Bogotá desde los municipios de la sabana occidental.

Asimismo, la Secretaría de Ambiente monitoreó las variaciones de la calidad del aire en la zona y encontró que se han reducido tanto las emisiones de vehículos como las velocidades de rodamiento del resto de flota que circula por el corredor. Durante el piloto de la implementación de la medida se realizaron siete operativos ambientales y se revisaron 78 vehículos, de los cuales 13 fueron inmovilizados.

La medida, que inicialmente tendrá una vigencia de seis meses, no cayó bien al gremio transportador, que pronostica serias afectaciones al sector. Su primer reparo es que, si se trata de un tema de polución, ya tienen una restricción con el pico y placa ambiental, que prohíbe el tránsito de carga pesada entre 9:00 y 10:00 a.m. Esto significa que, una vez arranque la medida, los vehículos de carga tendrán dos restricciones casi simultáneas, con solo una hora de licencia para transitar. Esto obligaría al gremio a buscar alternativas para moverse en la mañana.

Es ahí donde aparece el segundo reparo. Si los camiones tienen que aumentar sus recorridos, esto implicaría también un incremento en la inversión en peajes, combustibles, llantas y filtros. Según calcula el gremio, la medida incrementará sus costos operativos hasta $147 millones cada día. Y no solo eso: la decisión trasladará la congestión a otros corredores de acceso de la ciudad como la autopista Sur, la autopista Norte y la calle 80.

¿Por qué restringir el tráfico de vehículos pesados por la calle 13 podría reducir los índices de polución? Para el Distrito hay razones contundentes: los camiones, que en su mayoría se mueven con diésel, contaminan más que los viejos buses de Transmilenio. Según inventarios de emisiones de fuentes móviles de transporte hechos por la Secretaría de Ambiente, el transporte de carga produce el 43 % de las emisiones contaminantes en la ciudad. Muy por debajo de esa cifra están los buses del SITP provisional (13 %), los carros particulares (12 %) y las motos (9 %). Los articulados aparecen en las últimas casillas, con un 1,74 % de aporte a las emisiones. Con la medida se estima que se puede alcanzar una reducción cercana al 29% en las emisiones de material particulado en este corredor.

Movilidad aclara que algunos camiones podrán seguir transitando por la calle 13, dependiendo de lo que transporten. Vehículos como los de emergencia, de valores, de alimentos perecederos, animales vivos, flores y gases medicinales, de operativos de las empresas de servicios públicos domiciliarios en servicio, de transporte de materiales y maquinaria para obras públicas que se encuentren en servicio están exentos de la medida.

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