El monumetal trancón que se registró en la mañana de este miércoles en la carrera Séptima no solo desató la furia del secretario de Movilidad, Fernando Álvarez, también hizo que la directora de Control y Vigilancia, Ayda Luci Ospina, le presentara la renuncia a su cargo.
La enorme congestión vehicular se presentó por irresponsabilidad del contratista encargado del reparcheo de las calles 94 y 97, el cual debía levantar la maquinaria a las cinco de la mañana tal y como lo establece el plan de manejo de tráfico.
Por la incomodidad causada a los usuarios de la carrera Séptima, el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) anunció que el consorcio Distrito Bogotá tiene suspendidos otros trabajos y posiblemente tendrá una multa por las restricciones que se presentaron en la movilidad en plena hora pico.
Según el director del IDU, Néstor Eugenio Martínez, el contratista argumento su falta diciendo que los trabajos se extendieron más de lo previsto porque durante la noche había llovido mucho, y que por lo tanto, las obras continuaron hasta las nueve de la mañana.
Frente al pronunciamiento del contratista, el Director del IDU dijo que no hay excusa para tal falta.