Diez expertos internacionales en seguridad turística provenientes del exterior adelantaron un detenido examen sobre la imagen de Bogotá y el resultado de sus conclusiones fue altamente positivo: la ciudad se sacude del estigma construido durante las difíciles épocas de violencia que sacudieron el país, y hoy goza de un posicionamiento y de un prestigio que la acreditan como una de las capitales más importantes de América Latina.
Los expertos, provenientes de Estados Unidos, Israel y varios países latinoamericanos, entre ellos Brasil, Argentina, República Dominicana y Ecuador, quienes fueron invitados por el Instituto Distrital de Turismo para actualizar a los gremios y proveedores del sector en materia de seguridad, imagen y solución de riesgos turísticos, elogiaron la capacidad de transformación que ha tenido Bogotá en tan pocos años.
El director del IDT, Luis Fernando Rosas Londoño, reconoció que Bogotá ha venido trabajando con gran dedicación para fortalecer sus condiciones de competitividad; admitió que los resultados son visibles, como lo demuestra el crecimiento gradual de turistas foráneos, que este año pueden llegar al millón, y aceptó el reto de seguir superando día a día algunas de esas sombras que podrían persistir sobre nuestro imaginario de destino.
Algunas reacciones:
El director de Calidad y Asistencia de la Empresa Pública Quito Turismo, Patricio Velásquez, se mostró sorprendido por el acelerado posicionamiento de Bogotá en la comunidad latinoamericana, y aseguró que la ciudad tiene una ventaja turística comparativa y diferencial con las demás capitales de la región, que es su considerable, variada y rica oferta cultural, en la que quizás podría tener como cercana competidora a Buenos Aires.
Brian Richardson, director de asuntos de la comunidad LGBTI en Chicago, advirtió que venía por primera vez a Bogotá, pero que la percepción que tenía de ella y del país fue completamente borrada apenas bajó del avión. “Encontré una ciudad muy bella, desarrollada y abierta en temas LGBTI. Bogotá debería empezar a realizar marketing de ciudad para empezar a posicionarse como un destino único e interesante para este tipo de comunidades".
Amílcar Fernández, director general de la Policía de Turismo de República Dominicana recordó que hace más de 15 años Colombia prácticamente vivía en un “estado de guerra” en donde permanentemente se percibían los temores de secuestro. “En la actualidad en Bogotá, gracias al diseño de acertadas políticas de Estado, se ha recuperado ostensiblemente la percepción de seguridad”.
Luis Alberto Grünewald, presidente de la Fundación Turismo para Todos, de Argentina, recalcó que el panorama ahora es radicalmente distinto frente a lo que personalmente vivió en los años 90, cuando las medidas de seguridad eran extremas y “los taxis solo podían tomarse por teléfono”. “En la actualidad, las indicaciones que se manejan están plenamente acordes con los estándares de cualquier destino turístico universal y en ese sentido, vale la pena destacar el trabajo articulado que desarrollan las autoridades turísticas y de policía de Bogotá”.
Adir Steiner, asesor de la Alcaldía de Tel Aviv para asuntos LGBTI, señaló que "esta es una ciudad con clima maravilloso, acogedora y una calidad humana impresionante. Estoy seguro de que si Bogotá empieza a enfocarse aún más en posicionar su imagen en la comunidad LGBT, podría convertirse en uno de los destinos turísticos más atractivos en la actualidad".
Peter Tarlow, experto que asesora a Brasil para el Mundial 2014 y los Olímpicos 2016, sostuvo que Bogotá es un destino que se ha venido descubriendo positivamente, en donde “bien vale la pena una buena semana de estadía”, pero recomendó trabajar con más cuidado en la recolección de basuras, en la prohibición de grafitis sobre todo en las zonas referentes del turismo como La Candelaria, y en la ampliación de la cobertura del bilingüismo entre taxistas y servidores turísticos.